Un arbitraje externo garantizará la fusión de las constructoras ComyIsa y Tecsa

Las constructoras Coinylsa y Tecsa recurrirán a un arbitraje externo como garantía para llevar a cabo su fusión patrimonial en el supuesto de que existan divergencias sobre el resultado de las auditoras que se acaban de iniciar en ambas sociedades. Bové & Montero audita a Comyulsa y Peat Marwick a Tecsa.Las dos constructoras firmaron el pasado 9 de febrero un acuerdo de intenciones en el que se establece un plazo de cinco meses para el desarrollo de todas las negociaciones. Durante este período se espera, que las auditorías estén finalizadas, así como también el resultado del arbitraje externo que, en su caso, dictaminará el reparto patrimonial tras la fusión. La nueva empresa resultante dispondrá de un volumen de negocio estimado en torno a los 35.000 millones de pesetas.

El objetivo de Comylsa y Tecsa consiste en determinar el acuerdo antes de que termine el primer semestre. De esta forma, las dos constructoras podrían compensar la liquidación de impuestos de 1988 con la presentación del expediente preceptivo de solicitud de beneficios fiscales. La carta de intenciones supone el final de las negociaciones que Tecsa ha mantenido en los últimos meses con la multinacional francesa Bouygues.

Tecsa constituye uno de los principales agentes del sector dentro del segmento ferroviario. Coinylsa, sociedad gestionada bajo el régimen de management buy-out (los directivos controlan el capital), concentra su actividad en el subsector de edificación. Ambas compañías son también complementarias desde el punto de vista geográfico. ComyIsa trabaja básicamente en toda la costa mediterránea, mientras que Tecsa opera preferentemente en el País Vasco y Galicia.