La cosecha de 1938, estrella de la subasta de Marqués de Murrieta en Sotheby's

Una subasta de vinos de Marqués de Murrieta celebrada ayer en Londres en beneficio de la fundación dedicada a Graham Greene -creada por esa bodega- produjo más de 28.000 libras (casi seis millones de pesetas). El lote más caro, seis botellas de tinto de 1938, alcanzó las 2.200 libras (unas 460.000 pesetas), y será regalado a don Juan Carlos y doña Sofía, que nacieron en ese año.

La Fundación Graham Greene fue creada en 1987 por Vicente Cebrián, conde de Creixell y propietario de la bodega riojana, con el objetivo de acercar a británicos y españoles mediante el estudio de la lengua y cul...

Una subasta de vinos de Marqués de Murrieta celebrada ayer en Londres en beneficio de la fundación dedicada a Graham Greene -creada por esa bodega- produjo más de 28.000 libras (casi seis millones de pesetas). El lote más caro, seis botellas de tinto de 1938, alcanzó las 2.200 libras (unas 460.000 pesetas), y será regalado a don Juan Carlos y doña Sofía, que nacieron en ese año.

La Fundación Graham Greene fue creada en 1987 por Vicente Cebrián, conde de Creixell y propietario de la bodega riojana, con el objetivo de acercar a británicos y españoles mediante el estudio de la lengua y cultura mutuas, aunque la fundación está volcada en la literatura inglesa. Don Juan Carlos se interesó por la fundación y, según fuentes próximas a la bodega, por la subasta y la cosecha del año de su nacimiento.El vino de esa cosecha no es de los mejores presentados por la bodega riojana, y Sotheby's había estimado que por el lote se pagarían entre las 20.000 y las 32.000 pesetas. David Molyneux-Berry, que dirigía la puja, estaba en el secreto de lo que iba a ocurrir y al presentar el lote hizo notar que era "un tinto del año 1938, el del nacimiento del rey de España". La puja empezó en 100 libras (unas 21.000 pesetas) y subió, tan inesperada como radicalmente, por el interés que se tomó un iraní coleccionista de vino.

Éste, que dijo tener botellas de vino del año 1800, contaba en la colección con un hueco en 1938, que esperaba cubrir ayer. Llevó la puja hasta las 2.000 libras, cuando ya era patente que flaqueaba. En ese momento, Molyneux, que tenía orden de la bodega de pujar bastante más porque el vino era para un destinatario que no debía quedarse sin él, dio el salto hasta las 2.200 libras (unas 460.000 pesetas) y venció la resistencia del coleccionista iraní.

El resultado de la subasta fue muy satisfactorio para el conde de Creixell. La práctica totalidad de los vinos ofrecidos fueron adjudicados y la puja rindió casi seis millones de pesetas para la fundación, cuya sede está en el solariego pazo de Barrantes, en Pontevedra.

Cebrián, que dotó a la institución con 10 millones fundacionales y ha prometido darle cuatro millones al año, le entregó también como fondo 20.000 botellas de vino viejo de Marqués de Murrieta, de cosechas que van de 1890a 1970.

Con la subasta de estos vinos de calidad piensa conseguir fondos para la fundación y dar más relumbrón al Rioja. En una cata previa a la subasta, los expertos británicos se quedaron sorprendidos por la calidad de los vinos, uno de los cuales, una botella de blanco de 1913, respondió a la calidad alcanzando las 820 libras (unas 170.000 pesetas), la máxima cotización de todos los Murrieta.

La fundación que preside el sacerdote Leopoldo Durán, amigo íntimo de Greene, piensa desarrollar el legado del escritor británico, al que Cebrián sólo conoce desde hace tres años. En el verano de 1990, según el mecenas, la fundación impartirá sus primeros cursos de verano sobre literatura inglesa. En una reciente entrevista, Graham Greene, amigo de los regímenes de izquierda, respondía a la pregunta de si era comunista diciendo que cómo iba a serlo si había establecido una fundación en España con un cura y un conde".