El Barcelona se entrenó con el Fram

Los chicos del Fram sí son unos aficionados auténticos y no como los del Gotemburgo. Los suecos se revelaron como futbolistas disfrazados de bomberos y los islandeses son pintores, estudiantes, profesores de educación física o técnicos de televisión vestidos de jugadores. Llevaban casi un mes entrenándose a ratos simplemente para que en el último partido del año -la competición en Islandia no se reanudará hasta febrero- no les volvieran a meter ocho goles como en 1987 en Praga. En su país no hay quien les tosa, pero, fuera, un día reciben cinco, otro cuatro...El Barcelona les marcó cinco jugando al tran tran o, como diría Joaquím María Puyal, con una punta de gas. Bastó que Beguiristáin mostrara unas cuantas veces su zurda para que los islandeses se descompusieran. El exterior azulgrana marcó dos goles y dio otro par. El resto del equipo salió a estirar las piernas ante un rival que nunca abandonó su área. Tanta fue la superioridad azulgrana que el equipo de Johan Cruyff acabó jugando los últimos 25 minutos con 10 jugadores por lesión de Roberto. Y hasta así marcó otro gol.