La química de la resistencia

El mercado de valores se resiste a ceder. Ayer decidido pasar por alto un buen cúmulo de noticias que podían ponderar a la baja. La subida, hasta el 11,50% del tipo marginal de las letras del Tesoro en la cesión a tres meses pasó inadvertida; ya se había anticipado. También debía estar descontado el efecto de las declaraciones del ministro de Economía durante la presentación de los Presupuestos porque no afectaron, en absoluto, a la marcha de la sesión.Las decisiones se tomaron así con elementos del propio patio de operaciones. El mercado a crédito y, en concreto, el elevado volumen de ventas a crédito que se contrató la semana pasada fue el eje sobre el que giró la contratación de la mañana.

Muchos de los; valores que más habían cedido eran también los que mayor volumen de ventas a crédito tenían detrás. De la misma manera que esas operaciones había acelerado la caída, se esperaba que su cancelación pudiera provocar un repunte. Eso ocurrió en la última sesión, después de que el volumen de ventas a crédito del viernes supusiera más de un 10% del total contratado.

El repunte de los valores sobrevendidos, la mayoría dentro del grupo químico, reanimó la resistencia del mercado. Todo, como siempre, con un volumen de negocio mínimo y que ya parece estabilizado muy por debajo de los 10.000 millones de pesetas diarias.

La voluntad de los vendedores por no ceder sus títulos a precio de ganga terminó de frenar una potencial caída transformándola en una vuelta a los goteos. El problema es que las carteras más potentes prefieren mantenerse al margen mientras persista el goteo.