Alta política
El estado de la Unión fue realizada por Frank Capra después de Qué bello es vivir, en 1948, y después, por tanto, de un pasado glorioso en la comedia americana, tanto en sus popularísimas fábulas sobre la América del New Deal de Roosevelt como en otras anteriores, rodadas en el alba del cine parlante y hoy total e injustamente olvidadas. La veta política de sus películas ya no aparece disimulada en El estado de la Unión, que relata la campaña de un potente hombre de la industria en su candidatura para la presidencia de Estados Unidos y la decisiva ayuda en ella de su emprendedora mujer.Spencer Tracy y Katharine Hepburn prestaron sus carismas a esos personajes y, claro está, se ganaron al público; tanto que, de no haberse tratado de una ficción, Reagan no sería hoy probablemente, el primer presidente con un pasado ante las cámaras de Hollywood. Pero más allá del excelente juego de los actores, El estado de la Unión -basada en una pieza teatral de Howard Lindsay y Russell Crouse, de gran éxito en los escenarios de Broadway- es una muy frecuentable comedia dramática -que nunca llegó a estrenarse en España, aunque ya la hemos visto en TVE-, bien tramada e interpretada -añádase a Hepburn y Tracy unos excelentes secundarios: Adolphe Menjou, Angela Lansbury, Lewis Stone...- y una de las últimas obras de Capra, hoy un respetable nonagenario retirado del cine desde 1961, desde Un gángster para un milagro.
El estado de la Unión se emite a las 22.25 por TVE-1.
