Mendoza teme que la Real y el Barça impidan la transmisión en directo del Madrid-Oporto

El presidente del Real Madrid, Ramón Mendoza, manifestó ayer, en Valencia, su temor a que la oposición de la Real Sociedad y el Barcelona pueda dar al traste con la acordada, siempre y cuando la federación la permita, transmisión en directo del partido que su equipo jugará contra el Oporto el próximo día 21, a las 21.45 horas, en el estadio Luis Casanova, de la capital valenciana, y que corresponde a la ¡da de los octavos de final de la Copa de Europa.El conjunto vasco recibirá ese día en Atocha al Dinamo de Minsk, en la Recopa, mientras que el catalán se enfrentará en el Camp Nou al Dinamo de Moscú, en la Copa de la UEFA. Las directivas de ambos clubes ya han expresado su disconformidad con que se televise el del Madrid; el primero, a través de un télex enviado al organismo federativo, y el segundo, negándose a entablar cualquier negociación económica con TVE para llegar a un pacto similar al que llegó el Español en la pasada ronda, cuando cobró 28 millones de pesetas por no poner inmpedimento alguno a la transmisión del Nápoles-Madrid y permitir que su contienda con el Borussia de Moenchengladbach, también de la Copa de la UEFA, se diera en diferido. El conjunto blanquiazul visitará ese miércoles al Milán.

Mendoza, que había acudido a Valencia para ultimar diversos detalles del partido que su equipo deberá jugar en esta ciudad debido a la sanción de la UEFA por los sucesos registrados en el Bernabéu con ocasión de la visita del Bayerri de Múnich en la temporada precedente, confirmó que su club y TVE ya han llegado a un acuerdo para su transmisión en directo. "Los responsables de TVE están dispuestos a oscurecer Cataluña y el País Vasco", dijo, "pero mucho me temo que la Real Sociedad y el Barcelona sigan poniendo pegas". Mendoza añadió que la solución del problema depende ahora de la federación.

"Siempre se ha dicho que la única pega era la imposibilidad de oscurecer parte del territorio para evitar así perjuicios a terceros", expuso el presidente del Madrid. "Ahora que, por fin, se ha conseguido que TVE acceda al oscurecimiento, resulta que no es suficiente", agregó. Mendoza dijo que "TVE ha anunciado la transmisión antes de tiempo" y manifestó que, como en anteriores ocasiones, la emoción en torno a la transmisión o no del encuentro "durará hasta el último minuto", aunque negó que la incertidumbre se mantuviera de forma deliberada para que no afectase a la venta de las entradas.

Gran expectacíón

El Casanova registrará un lleno prácticamente absoluto. El Madrid calcula que entre 20.000 y 25.000 seguidores suyos se desplazarán hasta Valencia, donde el encuentro ha despertado enorme interés. El cargo en taquillas asciende a unos 100 millones de pesetas. El Valencia percibirá el 12% de los beneficios netos. La sanción de la UEFA ha supuesto un evidente perjuicio económico para el Madrid, que tuvo que jugar a puerta cerrada el partido de ¡da de la primera eliminatoria, contra el Nápoles, y que se ha visto condenado al destierro en la segunda. Sin embargo, según el gerente, Manuel Fernández Trigo, con este encuentro se cubrirán las previsiones establecidas para las dos primeras rondas europeas en el presupuesto para este año, de 100 millones, que fue confeccionado contando con la sanción. TVE pagaría 50 millones por el Madrid-Oporto y Mendoza logró firmar otro contrato con una cadena italiana cuando el equipo blanco se enfrentó al Nápoles.Las buenas relaciones entre el Valencia y el Madrid han permitido que el encuentro con el actual campeón de Europa se dispute en el Casanova, donde los madridistas ya jugaron un partido continental hace años, con motivo de otra sanción, ante el Stal Mielec, polaco. El domingo día 25 el Valencia jugará en el Bernabéti, frente al Madrid, en la Liga. Mendoza bromeó al respecto: "Les hemos facilitado las cosas al Valencia y a Di Stéfano al ahorrarles un viaje a Madrid para espiarnos".