Tempestades sobre Alaska

Vincent Sherman no pasará a las historias del cine con letra mayúscula; de momento, ni con minúsculas. A su firma le debemos algunos placeres: Vieja amistad; Old acquaintance, con Bette Davis y Miriam Hopkins; Rita Hayworth cantando Trinidad lady; el triunvirato fascinante que forman Clark Gable, Ava Gardner y Broderick Crawford en Estrella del destino; Errol Flynn en El capitán de Castilla y la última aparición de John Wayne y Maureen O'Hara juntos, en El gran Jack.A esa estela trivial de obras no maestras pertenece Imperio de titanes, en la que también ruge la estirpe de los grandes actores: Richard Burton, Robert Ryan, Carolyn Jones, Martha Hyer, etcétera. Sobre ellos, y en el marco de los días en que Alaska se integraba como Estado, Sherman pone en pie una novela-río de Edna Feber, mosaico colorista de tempestades, amores y pasiones, cortado sobre patrones convencionales. Larga y no siempre afortunada, tiene sus buenos momentos de cine de evasión.