Venables volvió a ser abucheado en Sarrià

Terry Venables, técnico del Barcelona, asistió al encuentro acompañado del delantero azulgrana Mark Hughes. Venables, que llegó cuando el partido ya había comenzado, tuvo que soportar un sonoro abucheo de los espectadores cercanos a su localidad, que no llegó a mayores. El entrenador barcelonista prefirió ubicarse en las gradas en lugar de acomodarse en el palco presidencial.

Según el técnico azulgrana, el partido no fue de gran calidad, pero debió tener un vencedor: el Español. "Los hombres de Clemente han merecido la victoria, porque siempre han dominado, especialmente en el segundo tiempo". Venables vió un Madrid "excesivamente defensivo, que se conformó con el empate y apenas inquietó la meta españolista". Al entrenador barcelonista el arbitraje de Ramos Marco no le pareció correcto, pero "prefiero no opinar". Venables viajará hoy a Madrid para incorporarse a la expedición azulgrana sin "excesiva preocupación, porque el resultado del partido no va influir en nuestro juego frente al Atlético".

Javier Clemente, entrenador del Español, también se quejó del arbitraje de Ramos Marco pero lo hizo con moderación. La actuación del colegiado la calificó de "diplomática". Para Clemente, la caída de Márquez dentro del área "era un penalti pitable, pero hay que verlo en la televisión". "No hemos tenido un justo premio a nuestro esfuerzo, porque en la segunda parte el Real Madrid no pasó del medio campo".

Por su parte, Leo Beenhakker, entrenador madridista, dio por bueno el empate y se sintió satisfecho del rendimiento de sus jugadores, porque "han sabido aguantar el fuerte ritmo del Español". Para Beenhakker, después de este resultado, "la Liga ya es cosa de dos, aunque para nosotros es importante afrontar el play-off con ventaja".

Ramón Mendoza, presidente del Real Madrid, también se sintió satisfecho por el empate, que supo a poco a Aritoni Baró, presidente del Español. Baró todavía tenía ayer la resaca del pleno federativo que "me costará olvidar por las actitudes personalistas que hubo".

En Sarriá se esperaba a Udo Lattek, técnico del Bayerri de Munich, rival del Real Madrid en la Copa de la UEFA, pero fue imposible localizarle.