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Catorce corredores españoles han muerto desde 1935

Catorce corredores españoles, con la muerte de Vicente Mata, han perdido la vida durante su carrera como ciclistas desde que en 1935 España se incorporó a las grandes competiciones internacionales. La mayoría de fallecimientos, ocho, se produjo a consecuencia de accidentes sufridos en pruebas oficiales.

La lista completa de fallecidos es: Francisco Cepeda (1937), Francisco Alomar (1955), Raúl Motos (1956), José Luis Talamillo (1966), Valentín Uriona (1967), Jesús María Puente y José María Madrigal (1970), Manuel Galera (1972), José Pérez de las Heras, Juan Santisteban (1976), Jesús Rodríguez Iguanzo y Rafael Cayón (1982), Alberto Fernández (1984) y Vicente Mata (1987).

En el plano internacional se han registrado 40 fallecimientos de corredores profesionales, principalmente franceses (15), italianos (10), belgas (5) holandeses (6) y portugueses (2).

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Destacan en esta larga lista campeones de la categoría de Tom Simpson, Sergio Coppi -hermano del campeonísimo Fausto Coppi-, Stan Okers y recientemente, el portugués Joaquim Agostinho, en 1984.

La primera víctima española fue Francisco Cepeda, durante el Tour de 1937. Entre los restantes fallecidos habían destacado especialmente en sus carreras Valentín Uriona, ganador del Dauphine Liberé y de la Milán Turín, en 1964, y Juan Santisteban, un gregario cotizado, muerto en el Giro.

Fuera de carrera

Fuera de la competición propiamente dicha fallecieron Francisco Alomar, José Pérez de las Heras, José Luis Talamillo, Rafael Cayón y, más recientemente, Alberto Fernández.Francisco Alomar, en 1955, durante un entrenamiento, se estrelló contra un carro. Tuvo la mala fortuna de clavarse una de sus varas y falleció, poco después a consecuencia de las heridas.

También encontró la muerte, mientras efectuaba un entrenamiento, el que fue campeón de ciclocross José Luis Talamillo. Un camión le atropelló. Y de Igual manera falleció José Rodríguez Iguanzo, en 1982, en la isla de Gran Canaria.

No sólo sobre la bicicleta han muerto profesionales en activo: Rafael Cayón, en 1982, falleció como Consecuencia de las heridas que sufrió al estrellarse el vehículo que conducía contra un árbol, en las proximidades de Torrelavega.

Alberto Fernández murió, junto a su mujer, el 13 de diciembre de 1984 al chocar el automóvil que conducía frontalmente contra otro vehículo. El accidente ocurrió cerca de Aranda de Duero, pocas horas después de que el ciclista recogiera en Madrid la distinción como corredor más regular de la temporada.

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