La Caja de Ahorros de Galicia absorberá a las rurales de La Coruña y Pontevedra

Las cajas rurales de La Coruña y Pontevedra, que a finales de 1985 tenían unas pérdidas acumuladas de 887 y 2.503 millones de pesetas, respectivamente, serán absorbidas por la Caja de Ahorros de Galicia en condiciones muy similares a las que se negociaron entre la Rural de Madrid y la Caja de Ahorros de Madrid.

Las dos cajas rurales gallegas forman parte del paquete de entidades cuya viabilidad independiente se considera imposible por las autoridades económicas y que se ha decidido tratar de mantener mediante procesos de absorción por otras entidades financieras.

La Caja de Ahorros de Galicia se compromete a absorber el pasivo y el activo de las dos cajas rurales, así como al personal de las mismas. La Caja de Galicia mantendrá la mayor parte de las oficinas actualmente abiertas de las dos entidades, aunque no se descarta que en los casos en que haya coincidencia en algunos pueblos pueda cerrarse alguna para trasladarla a otra localidad.

Las cajas rurales de La Coruña y Pontevedra se integraron en el plan de saneamiento de cooperativas de crédito asociadas con el Banco de Crédito Agrícola y recibieron ayudas del Fondo de Garantía de Depósitos por valor de 2.387 millones de pesetas en el caso de la primera y de 4.089 millones de pesetas en el segundo. Al tiempo, recibieron unas cantidades mucho más reducidas del consorcio de compensación de cajas rurales.

Estas últimas ayudas serán canceladas casi con toda seguridad y, a cambio, el plazo de reembolso de los préstamos del fondo de garantía se aumentará en uno y dos años respectivamente. Las aportaciones de capital de los socios de las cajas rurales se mantendrán durante un periodo de tiempo como depósitos a plazo por los que recibirán tipos de interés no muy alejados de los de mercado como ha ocurrido en casos similares.