Denuncia contra el Banco de Bilbao por aplicar un canon a las libretas de ahorro

José Guillén, vecino de Valencia ha presentado denuncia contra el Banco de Bilbao por aplicar un canon sobre el saldo de una libreta de ahorro que no había sufrido movimiento, sin que se hubiera informado al cliente, sobre este particular. Pese a haberla tramitado ante el Juzgado de Instrucción número 7 de Valencia, el abogado de Guillén, Alberto Jorro, mostró ayer su sorpresa al haber pasado el expediente al Juzgado de Distrito número 14 de esta ciudad,"lo cual supone que el hecho ha sido considerado como una falta", señaló.

La presunta irregularidad fue observada por Guillén el 7 de febrero pasado, al solicitar la actualización del saldo de una libreta de ahorro perteneciente a su hija, de ocho años. La cartilla, que no había sufrido movimiento alguno desde septiembre de 1979, en que tenía un saldo de 1.162 pesetas, había pasado a tener una liquidez de 194 pesetas. Según Jorro, los directivos bancarios se mostraron dispuestos a corregir cualquier supuesta irregularidad, si bien le informaron sobre el canon que se aplica por el mantenimiento de las cuentas, que oscila entre las 100 y las 150 pesetas semestrales. Esta costumbre, al parecer, está generalizada en el sector bancario.Jorro y Guillén solicitaron que se informara a todos los clientes sobre tal extremo. Sin embargo, los directivos del Banco de Bilbao se mostraron reticentes a realizar la circular informativa.

El abogado afirmó que "la forma en que se ha formalizado el asiento es irregular y podría considerarse apropiación indebida, por cuanto la legislación obliga a informar al cliente sobre los movimientos de sus cuentas bancarias".

"Por otra parte", dijo, el solo hecho de constituir este canon, como parece, una costumbre generalizada sería suficiente para que el Banco de España abriera una investigación y que las organizaciones de defensa de los consumidores se pronunciaran al respecto".

También señaló que "es absurdo que una libreta de ahorro tenga un cargo por ahorrar, lo cual, por otra parte, va en detrimento del pequeño ahorrador". "La legalidad exige que si hay cargos se informe de los mismos y se asienten debidamente. En este caso no se ha hecho."