El Barcelona visita a un Joventut sin confianza
El partido entre el Joventut y el Barcelona centra la atención de la primera jornada de la segunda vuelta de la fase A-1 de la Liga nacional de baloncesto. El Joventut ha perdido confianza tras sus últimos partidos. Por su parte, el Madrid recibe al Cacaolat.
Los dos conjuntos más potentes del baloncesto catalán se enfrentarán por primera vez desde que el Joventut ganara por dos veces en el Palau Blaugrana con apenas cinco días de diferencia. La situación ha evolucionado de forma muy desfavorable para el Joventut desde esa semana del pasado diciembre. Desde entonces no ha podido contar con Andrés Jiménez, que, tras salir de una lesión, se fracturó esta semana los huesos de la nariz al chocar con Jofresa en un entrenamiento.Además, la derrota sufrida por el Joventut en su pista, el pasado sábado, ante el Madrid, ha hecho que sus jugadores pierdan la confianza en sus propias fuerzas después de haber sido líderes durante todo el campeonato.
En el Barcelona no hay problemas físicos especiales y existe cierto aire de revancha entre sus jugadores. Tampoco hay que olvidar el morbo que supone la primera actuación en Badalona del entrenador Aito García Reneses desde su marcha del club. Aito, ahora técnico del Barcelona, ha estado como espectador en algún encuentro y no ha sido tratado precisamente con delicadeza.
El resto de la jornada en la A-1 la componen los encuentros Madrid-Cacaolat, Español-Estudiantes y Breogán-CAI. Este último se jugará el domingo y será transmitido por TV-1. Son partidos que podrían parecer igualados e interesantes en otro momento, pero que ahora tienen claros favoritos en los madrileños y zaragozanos. La visita del Cacaolat al pabellón del Madrid llega en un momento muy distinto al que supuso la victoria de los de Granollers en la capital a principios de temporada.
Evitar el descenso
En el grupo A-2 se juegan los partidos siguientes: Cajamadrid-Fórum, Claret-Caja Álava, Licor 43-Magia y TDK Manresa-Clesa.
La jornada es una nueva oportunidad para intentar evitar el descenso por parte de unos equipos que partieron esta temporada con el potencial económico mayor de su historia.
