El Papa exhorta en su homilía a "vencer la fuerza del maligno"

Juan Pablo II concelebró ayer la misa con los 150 padres sinodales en la basílica de San Pedro, durante la impresionante ceremonia de clausura del sínodo extraordinario convocado para analizar los 20 años del Concilio Vaticano II.En su homilía, el Papa recordó la presencia del demonio en el mundo y que la Iglesia se apoya en el misterio de la redención, "con el que vence la fuerza del maligno", añadiendo que la verdadera Iglesia de Cristo sufre de la "enemistad" del demonio, aunque, "por gracia de Dios, no le teme". Abundaron también en el texto papal, como ha ocurrido a lo largo de las sesiones sinodales, las alabanzas al concilio, pero siempre matizadas por la vuelta al concepto de Iglesia misterio, con preferencia a la Iglesia como pueblo de Dios.

En este sentido, dijo el Papa: "Al final del segundo milenio, la Iglesia desea vivamente ser la Iglesia del mundo contemporáneo, pero al mismo tiempo es consciente de que puede realizar este misterio solamente en la medida en que es, en Cristo, sacramento de la unión íntima con Dios, y por ello es también sacramento de la unidad de todo el género humano".

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