Mañana comienza en Roma la conferencia mundial de la FAO
Se celebra este año el 40º aniversario de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Una fecha que coincide, además, con la 23ª Conferencia Mundial Bienal, que es el órgano rector más importante de la organización.En las celebraciones del 40º aniversario de la fundación de la FAO y en la conferencia, que tendrá lugar del 9 al 28 de este mes, participarán cada uno tre s presidentes de Estado: Mitterrand, Soeharto y Alan García Pérez, el joven líder peruano que tendrá, además, una conferencia de prensa también en la FAO.
Ayer, el director general de la FAO, el libanés Edouard Sauma, tuvo un encuentro con la Prensa de todo el mundo para anticipar la conferencia mundial de este año.
Sauma fue tiroteado con preguntas a las que supo responder con su clásica habilidad. Puso de relieve, antes de responder a las preguntas de los informadores, que el 40º aniversario de la FAO se celebra en concomitancia con la importante cumbre de Ginebra entre Reagan y Gorbachov y que mientras allí "se hablará de arinas", aquí, en Roma, se abordará' el tema "del hambre en el niundo".
A la pregunta de EL PAIS de si con motivo de la conferencia mundial de la FAO estaba previsto enviar algún mensaje a Ginebra acerca del tema del despilfarro de las armas, mientras cada día mueren de hambre en el mundo, según informes de la Unicef, 40.000 niños, Sauma respondió: "Me gustaría mucho poder hacerlo, pero me temo que, conio sucede en la Unesco, será difícil que se pongan, de acuerdo sobre el tema los 158 países participantes". Y añadió: "Sin embargo, en mi conferencia hablaré de los efectos negativos del problema. Recordaré que los gastos anuales de armamento en el mundo equivalen al total de la deuda del Tercer Mundo, exactamente un billón de dólares USA".
Las dos grandes novedades de la conferencia de este año van a ser la presentación para su aprobación de un proyecto de pacto mundial de seguridad alimentaría, "que proclama la seguridad afimentaria como una responsabilidad colectiva de la humanidad", y un código internacio*nal de conducta para la distribución y aplicación de plaguicidas". Tanto el pacto de seguridad como el código de conducta sobre los plaguicidas no tendrán, según Sauma, un valor jurídico, sino ético. Y esto porque es el único modo de que puedan ser aprobados por todos. Sin embargo, subrayó el director de la FAO, se trata de una iniciativa importante, ya que "servirá para ir creando una mentalidad y una conciencia mundial sobre el tenia".
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