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Las autoridades aduaneras españolas, acusadas de la muerte de un caballo

Soledad Gallego-Díaz

Jacques Coupière, propietario de una cuadra francesa de caballos de saltos de obstáculos, ha denunciado a las autoridades aduaneras españolas y portuguesas como presuntas responsables de la muerte de uno de sus mejores ejemplares, Jecoratox, valorado en unos 12 millones de pesetas.Según el propietario, el caballo participó en buenas condiciones en el Concurso Internacional de Saltos de Obstáculos de Lisboa, el pasado mes de septiembre, pero, de regreso a Francia, fue retenido durante 10 horas en la. frontera hispanoportuguesa de Badajoz. Los aduaneros, afirma, se negaron a que los caballos salieran de los camiones, de forma que tuvieron que soportar fuertes temperaturas en una inmovilidad forzosa. Jecoratox sufrió un golpe de sangre, diagnosticado por un veterinario español, y permaneció dos días en Madrid sometido a tratamiento.

Pese a su mal estado, las autoridades aduaneras españolas, siempre según Coupiére, le obligaron a repatriar inmediatamente al caballo. "Jecoratox no superó nunca los malos tratos recibidos y falleció el pasado miércoles, víctima de una embolia pulmonar", explica.

El propietario ha presentado una protesta ante la Federación Hípica Francesa y ante la internacional para que abran una investigación. "Un caballo no puede soportar diez horas a pleno sol y con un calor agobiante sin caer enfermo. Obligarlo a . permanecer encajonado tanto tiemipo es condenarlo a sufrir una embolia, que es lo que ha ocumido con Jecoratox", añadió.

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