Un hombre acusado de maltratar a su ex esposa niega haberla agredido

Álvaro López Portilla, ex esposo de María Luisa Gañán Gil, niega haber agredido a la mujer y asegura que no es el autor de las pintadas con insultos que han aparecido contra ella en paredes de la zona de Quevedo, en Madrid.El matrimonio se separó judicialmente hace 14 meses, y desde entonces Álvaro López asegura que sólo va a casa de María Luisa para ver a sus hijos y llevarles a algún sitio de diversión.

Según ha declarado, hace dos meses que se despidió de su trabajo como jefe de planta aséptica de la empresa RAM. "Me marché cinco minutos antes de que me echaran", dice, "porque mi ex esposa me llamaba continuamente al trabajo". Álvaro López asegura que en los dos últimos meses alguien le ha pintado con un pulverizador palabras insultantes en su automóvil, le ha pinchado las dos ruedas delanteras y le ha roto en tres ocasiones el parabrisas.

María Luisa Gañán ha demandado en más de 30 ocasiones a su ex esposo por agresiones, insultos y amenazas. Existen varias sentencias de distintos juzgados de distrito de Madrid que condenan a Álvaro López a pagar multas que oscilan entre las 1.000 y las 7.000 pesetas. Álvaro afirma que las multas se deben a que no ha podido comparecer a todos los juicios debido a su trabajo, y sólo reconoce haber pegado dos bofetadas a su esposa en una ocasión.