Las nevadas se intensifican en Asturias, mientras mejora el tiempo en Castilla y León

Las precipitaciones de nieve se intensificaron ayer en las zonas altas de Asturias. La situación creada en seis puertos de montaña -Tarna, Leitarlegos, Somiedo, Pontón, Serredo Y Ventana- obligó a los automovilistas a utilizar cadenas para circular por ellos. Sin embargo, fue en el de San Isidro, que estuvo cortado al tráfico, donde se registraron las mayores nevadas. También continuó nevando en los pueblecitos del municipio de Cabrales, en el oriente de Asturias, próximos a los Picos de Europa.

En las provincias de Castilla y León la nieve, que cayó abundantemente en extensas áreas durante los dos primeros días de la semana, desapareció casi tan rápidamente como había llegado. Sólo permanece, según informa Luis Miguel de Dios, en las zonas de alta montaña.La ausencia de nuevas nevadas y la lluvia que cayó más tarde han contribuido a mejorar sensiblemente el estado de las carreteras, los puertos y las calles de las ciudades, donde no se han llegado a formar capas de hielo.

Únicamente continúan cerrados puertos de menor relieve en las estribaciones de Gredos (Ávila) y en los bordes del macizo cantábrido, en el norte de León. En esta zona no se puede circular por San Isidro, que enlaza León con Asturias por una vía de segundo orden, ni por Las Señales, dentro de la provincia leonesa.

En otros 13 puertos era necesario el uso de cadenas, entre ellos San Glorio, Madalena,y Pontón, al igual que ocurría en el puerto de Piqueras, entre Soria y Logroño. En Ávila el cierre afectó a los puertos de La Lancha, Navalmoral, Serranillos y Peñanegra, mientras que el uso de cadenas era necesario en varios más, entre ellos Tornavacas: En la provincia abulense, que fue la que mayor cantidad de nieve recibió, se podía ayer circular por casi todas las carreteras.

Otro tanto ocurrió en Segovia, donde la mejoría fue asimismo sensible. Sólo Guadarrama, Cotos y La Morcuera presentaban problemas, aunque muy inferiores a los de días pasados. En el resto de la región no hubo obstáculos importantes para el tráfico, si bien la cantidad de lluvia caída afectó ligeramente a algunas carreteras.

En el norte de Valladolid, límite con León, se desbordó el río Valderaduey, que anegó 300 hectáreas en los términos de Becilla y Castroponce (Valladolid) y en Palencia las aguas del Valdeginate -abandonaron su cauce y penetraron en las calles de Castromocho, a 30 kilómetros de la capital. No hubo que lamentar víctimas, y las pérdidas materiales no son demasiado elevadas.

En el sur de Salamanca, otra de las zonas que recibió mayor cantidad de nieve, la normalidad fue total durante la jornada de ayer.

Una vez que cesó la nevada, se pudo restablecer el tráfico entre la capital, Ávila y Béjar y mejoraron las comunicaciones con los pueblos de la tierra de la Peña de Francia y con los de la vertiente norte de Gredos.

Esta situación de mejoría probablemente será pasajera, puesto que para las próximas horas se anuncian nuevas ventiscas de nieve y agua.