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El Madrid ha preparado con mayor atención la final de la Recopa que el Simac

Luis Gómez

El Real Madrid se juega hoy algo más que una final cualquiera y afronta este hecho con una trascendencia fuera de lo común. El pasado año, el club madridista se quedó a cero en sus dos secciones mas importantes: fútbol y baloncesto. Esta temporada, llega a la Recopa de baloncesto como primera excusa para romper una mala racha; toda la entidad aguarda impaciente el resultado desde el pasado lunes. Por el contrario, la delegación del Simac llegó a Ostende 24 horas antes del partido. La final se jugará a las 21.00 horas y será televisada.

La final de la Recopa enfrenta al Real Madrid con el líder de la Liga italiana, un choque, pues, entre dos grandes del baloncesto europeo. Y, sin embargo, una final así se disputará en una cancha de juguete, que dejó sorprendidos a jugadores y técnicos. El pabellón de Ostende es pequeño, de madera todo él, con cabida para no más de 1.500 espectadores. Tiene, además, unas dimensiones del rectángulo de juego algo más reducidas de lo normal: "Aquí nos pueden meter un 1-3-1 que nos vuelva locos", manifestó Lolo Sainz al ver la cancha por vez primera. Sus reducidas dimensiones favorecerán la táctica defensiva e impedirán, en algo, las acciones rápidas o de contraataque. Por lo visto en los entrenamientos, en cuatro zancadas un jugador se pone en la canasta contraria. El único dato positivo es que el parqué parece de buena calidad. "Tengo la impresión", dijo Lolo Sainz, "de que va a ser un encuentro de pocos puntos. Las canastas no me gustan, porque tiemblan demasiadoLolo Sainz, como medida precautoria, no ha querido atosigar a sus jugadores con órdenes tácticas en las últimas horas. La preparación de este encuentro se inició semanas atrás con el descanso a que les ha obligado el campeonato liguero. La responsabilidad especial la tendrá, esta vez, Robinson, que será el marcador de Meneghin y, por tanto, el hombre que soporte el mayor sacrificio del partido. Para Lolo, una de las claves estará en comprobar si el Real Madrid logra bloquear el juego de D'Antoni, el base, y al citado Meneghin. De otro lado, la posible ventaja italiana estaría en comprobar si puede debilitar los porcentajes de acierto en el tiro de hombres como Jackson y Fernando Martín.

Ya de una forma más concreta Lolo Sainz matizó que el marcaje de Robinson a Meneghin pueder ser la clave de la final, porque podría asegurar al Real Madrid cierta ventaja en los rebotes, hecho fundamental para romper el duro esquema defensivo de los italianos. Robinson vino al Real Madrid para marcar y hacer una eficaz labor defensiva, justo lo que ha de hacer en esta final. Anular a Meneghin puede suponerle un paso adelante en su intención por renovar.

Cada jugador del Real Madrid ganará cerca de 175.000 pesetas si ganan la final. Los colegiados del encuentro han sido ya motivo de algún comentario. Se trata del inglés Richardson y el yugoslavo Petrovic, y su problema radica en que son muy poco conocidos. "No parece que tengan entidad para arbitrar una final", manifestó un directivo madridista. Pero según Lolo Sainz, "no sabemos cuál será su comportamiento; es decir, si dejarán a medio equipo italiano en el banquillo o si se tragarán el pito".

El club, por su parte, desplazó a Ostende a una representación notable de directivos y funcionarios. Los jugadores madridistas, de baloncesto se entiende, estaban acostumbrados a recorrer Europa poco menos que en solitario, preparándose cada uno hasta su equipación, y con Corbalán, renovado por dos años, de médico. Ahora, cuentan con una delegación amplia, utilleros y médico del club incluidos.

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