De Carlos y Menotti abren la batalla dialéctica de cara al encuentro del sábado

Luis de Carlos, presidente del Real Madrid, y Menotti, técnico del Barcelona, han abierto la batalla dialéctica previa a la celebración del Real Madrid-Barcelona el próximo sábado. De Carlos denuncia la existencia de un montaje para que el ambiente pese en contra de un colegiado, Ramos Marco, "que nos ha hecho de todo". Menotti, por su parte, lanzó la primera piedra al afirmar que "mi gran temor es que el árbitro del sábado vuelva a equivocarse a favor del Real Madrid. El técnico azulgrana ha divagado acerca de cierto favoritismo arbitral hacia el Real Madrid en los últimos encuentros.De Carlos respondió a las declaraciones de Menotti con una extensa entrevista a la agencia Efe. "La historia de que somos el equipo del régimen está ya vieja; se viene diciendo desde que el fútbol es fútbol. Se ha dicho también que ganábamos porque estábamos al frente de la federación, sin pensar que, casualmente, los presidentes federativos han sido casi siempre catalanes". De Carlos anunció que existe "un claro montaje, habitual por otra parte" y quiso mostrar su despreocupación por el colegiado Ramos Marco.

Sin embargo, en un momento dado, habló con más sinceridad sobre el colegiado: "Nos ha hecho de todo. Contra el Athlétic, en Liga, ganamos ampliamente, pero, a pesar de eso, dije públicamente que había estado muy mal. Después, en la final de la Copa de la Liga, frente al Barcelona, se inventó un penalti a Schuster y, finalmente, en el Teresa Herrera, contra el Athlétic, nos anuló un gol flagrante, lo que protestó el público. Creo que en todas esas ocasiones nos perjudicó largamente".

Las decisiones arbitrales favorables al Real Madrid arrancan, según el técnico azulgrana, desde el momento en que frente al Zaragoza "el árbitro, tras las reclamaciones de los jugadores del Madrid, rectificó su decisión de conceder el gol del empate del cuadro visitante".

Con respecto al encuentro de Salamanca, hubo jugadores del Barcelona que manifestaron públicamente su extrañeza e incluso emplearon términos como el de "capotazo arbitral". De Carlos explicó, en este punto, que "en el partido Real Madrid-Zaragoza, el jugador Amarilla reconoció haber conseguido el gol con la mano, por lo que su concesión sí que hubiera supuesto toda una flagrante injusticia".