Victoria final del alemán Walter Rohrl y dominio absoluto de Audi en el Rally de Montecarlo

El piloto alemán occidental Walter Rohrl, al volante de un Audi Quattro, se proclamó ayer vencedor del Rally de Montecarlo. Es la cuarta victoria de Rohrl en la carrera más popular y prestigiosa del mundo, conseguida con cuatro coches diferentes y en los últimos cinco años. La aplastante victoria del equipo Audi -sus tres coches en los tres primeros puestos de la clasificación final- contrasta con el descalabro del equipo italiano Lancia, cuyo mejor hombre, Attilio Bettega, terminó en quinto lugar -por detrás del R-5 Turbo del francés Therier-, a media hora del vencedor.

El temporal de nieve, que devolvió al Rally de Montecarlo su perdida fisonomía, fue decisivo en el resultado final. El español Serviá, con Opel Manta, abandonó antes de terminar la etapa final cuando podía alcanzar hasta el décimo puesto. Hizo lo que se esperaba de él, pero le pudo el temporal al que no estaba acostumbrado.El alemán Walter Rohrl y el sueco Stig Blomquist comenzaron anoche la Etapa Final separados sólo por 29 segundos. El tercer piloto de Audi, el finlandés Hannu Mikkola, actual campeón del mundo, estaba en tercera posición, pero muy descolgado del dúo de cabeza. Los demás, incluido el potente equipo Lancia, ya m contaban. La victoria final estaba sólo al alcance de Rohrl y Blomquist.

Audi dio libertad a los dos pilotos para que jugaran sus bazas como quisieran. Para la escudería alemana occidental, el triunfo era seguro. Blomquist, algo más rápido sobre la nieve, tiene como objetivo la conquista del título mundial esta temporada, mientras Rohrl y Mikkola sólo disputarán algunas pruebas. Para el sueco, los puntos del segundo puesto en Montecarlo eran muy interesantes. Sin embargo, para Rohrl, que sólo disputará seis carreras este año, la victoria en el Rally de Montecarlo, su cuarto triunfo, serviría para consagrarse como el mejor piloto de rallies de todos los tiempos.

La última noche

Sin la necesaria adaptación al coche, ante compañeros de equipo de la talla de Blomquist y Mikkola, y frente al equipo Lancia, al que le dio el triunfo el año pasado, el triunfo de Rohrl demostraría que los 15 millones de pesetas que percibe de Audi por cada carrera resulta barato.Blomquist comenzó la Etapa Final con un duro ataque para tantear las fuerzas de su compañero-rival. La respuesta de Rohrl fue inmediata y contundente. La diferencia de 29 segundos se hizo mayor y, con ella, la rendición del sueco. Porque, cuando comprobó que el alemán era inalcanzable, optó por llegar a un acuerdo de no agresión entre los dos. La carrera estaba decidida. El camino hasta Montecarlo se hizo un paseo.

Rohrl, con su curioso Audi Quattro con el embrague suplementario en la palanca del cambio, acaba de asegurarse su cuarto triunfo en el Rally de Montecarlo, después del que consiguió con Fiat en 1980, con Opel en 1982 con Lancia en 1983. En las 52 ediciones disputadas del Rally de Montecarlo, sólo el francés Jean Trevoux, al volante de un Hotchkiss -1934, 1939, 1949 1951 -, y el italiano Sandro Munari, sobre un Lancia -1972 1975, 1976 y 1977-, habían logrado antes que Rohrl cuatro victorias. Pero, en los casos precedentes, siempre con la misma marca.

En la clasificación final, por detrás del vencedor, Stig Blomquist -a poco más de un minuto- y Hannu Mikkola -a casi 13 minutos- consolidaron el aplastante dominio de los Audi Quattro. El francés Therier, con un R-5 Turbo, terminó en cuarto lugar, pero a casi 25 minutos de desventaja, mientras el primer Lancia, el del italiano Bettega, acabó a media hora.

El mejor del mundo

Walter Rohrl, un piloto de 36 años, alto, rubio, muy delgado y algo desgarbado, es el mejor especialista de rallies del mundo de todos los tiempos. Su palmarés es impresionante: cuatro victorias en el Rally de Montecarlo, numerosos triunfos en las restantes pruebas del mundial y dos veces campeón del mundo.Piloto seguro, frío, muy completo, rapidísimo en todos los terrenos -nieve, hielo, tierra, asfalto- y capaz de mantener un ritmo endiablado en todos los tramos de velocidad a lo largo de los días que dura una carrera de este tipo, sin que las incidencias o fallos mecánicos le alteren lo más mínimo ni le hagan desfallecer.

Hombre muy introvertido y hogareño, está cansado de la vida que exige este tipo de competición. Para acumular súficiente dinero antes de retirarse, Walter Rohrl aceptó al final de la pasada temporada un fabuloso contrato con Audi, que le permitirá ingresar este año unos 120 millones de pesetas sin tener que estar demasiado tiempo alejado de su casa y su familia. Un par de temporadas más y dirá adiós, aunque podría seguir durante algún tiempo, porque la vida de los pilotos de rallies es mucho más larga que la de los de Fórmula 1 -se llega más tarde pero se dura más-. Será entonces cuando los pilotos nórdicos vuelvan a dominar el mundial, tras el paréntesis del falso-nórdico Walter Rohrl.

Clasificación: 1. Rohrl (RFA, Audi), 8.52.29.2. Blomqvist (Suecia, Audi), a 1.13. 3. Mikkola (Finlandia, Audi), a 12.40.4. Therier (Francia, Renault), a 24.24. 5. Bettega (Italia, Lancia), a 29.12. 6. Biasion (Italia, Lancia), a 37.20. 7. Darniche (Francia, Audi), a 40.10. 8. Alen (Finlandia, Lancia), a 43.36. 9. Salonen (Finlandia, Nissan), 52.24. 10. Grundel (Suecia, Golf), a 52.24.