RTVE implantará el próximo año un sistema para medir diariamente la audiencia de sus programas

Radiotelevisión Española destinará 375 millones de su presupuesto a la infraestructura técnica que permita implantar el próximo año audímetros para la medición de audiencia diaria, según manifiesta Juan Luis Méndez, jefe de Estudios de Análisis de Contenido e Investigación de Audiencia de RTVE. Los audímetros son pequeños aparatos acoplados al televisor que registran en distintos intervalos de tiempo si está conectado y en qué canal.

El audímetro puede registrar qué fuente suministra información al televisor: emisiones convencionales por aire, cable, ordenadores personales, teletexto, videojuegos o videocasetes. Permite conocer en todo momento qué tipos de programas atraen audiencia y qué espacios la despiden, de forma que una de sus futuras aplicaciones será objetivar nuevos sistemas de contratación de publicidad en función del volumen de telespectadores.Los audímetros españoles tendrán, por otra parte, prestaciones superiores a los que funcionan en la mayoría de los países europeos, ya que se adoptará un sistema interactivo. El audímetro mide tan sólo la audiencia por hogares, pero, mediante un mando a distancia, cada miembro de la familia puede tener asignado un código personal en los respectivos botones o sensores del telecomando. Las operaciones que registra el audímetro son, además del encendido y apagado del televisor, eventuales respuestas de los telespectadores sobre la aceptación o grado de interés con que valoran los programas.

Uso del teléfono

El sistema que implantará RTVE podrá medir tanto la audiencia (número de telespectadores) como la aceptación de programas. El propósito de instalar audímetros se remonta al mandato del ex director general Fernando Castedo durante 1981. El concurso que entonces se convocó fue declarado desierto. RTVE ha resuelto que el modem (es decir, el sistema de conexión telefónica para transmitir los datos registrados por el audímetro) esté incorporado al teléfono. El audímetro transmite la información cuando llega a la casa del telespectador una llamada telefónica no audible.

Esta recogida de información en los hogares se puede efectuar con la periodicidad que se programe. Por ejemplo, cada 20 segundos, e incluso por segmentos inferiores de tiempo, duración que corresponde al mínimo, espacio emitido por TVE -un anuncio de publicidad- o por bloques de varios minutos. Este seguimiento permite conocer en breves intervalos de tiempo la evolución de la audiencia a lo largo de un mismo programa, los efectos de inercia en el consumo de televisión, etcétera. Es decir, informaciones muy precisas y puntuales sobre el comportamiento de los telespectadores, desconocidas hasta ahora por RTVE.

Los datos de los audímetros son acumulados y enviados a una unidad central para su procesamiento, de forma que a las pocas horas, al día siguiente en todo caso, se podrá saber cuántos telespectadores han visto la programación a lo largo del día y, eventualmente, los grados de aceptación.

RTVE tendrá que decidir si gestionará directamente el tratamiento de esa información o si acudirá al concurso de terceros, posibilidad que parece más razonable al objeto de garantizar la neutralidad e imparcialidad de los datos.

El Ente Público contempló la posibilidad de que el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (Cedeti), organismo dependiente del Ministerio de Industria, colaborase en el desarrollo de los prototipos de audímetros. Posteriormente, la colaboración tecnológica de Cedeti no fue considerada necesaria por parte de RTVE, cuyos servicios técnicos han diseñado ya las características de los aparatos. Los audímetros se situarán debajo de los receptores de televisión y tendrán una altura máxima de seis centímetros. El concurso para su fabricación podrá convocarse en cualquier momento. RTVE tiene intención de instalar en principio alrededor de 1.500 audímetros de acuerdo con una muestra representativa de toda la población.

La historia

La firma norteamericana Nielsen puso en funcionamiento los primeros audímetros, a finales de los años 30, para medir la audiencia de radio; de ahí su nombre. Nielsen los extendió en la década de los 50 a las emisiones de televisión, según comenta José Ramón Rubio, jefe del Servicio de Investigación de Audiencia de RTVE. Nielsen y la británica AGB son las dos principales firmas en este sector de medición de audiencia. El Reino Unido, Francia, República Federal de Alemania, Italia, Holanda y Suiza son algunos de los países europeos en los que existen distintos sistemas de audímetros para la medición de audiencia.

Los audímetros mejorarán, por consecuencia, los actuales métodos de trabajo de RTVE. Los únicos datos de audiencia que tiene RTVE por el momento son los proporcionados por Estudio General de Medios (EGM). Para evaluar la aceptación de los programas de TVE, el Ente Público dispone del departamento que dirige Juan Luis Méndez. Durante el último trimestre del pasado año el panel semanal de aceptación se amplió, por primera vez, a las emisiones de la segunda cadena de TVE. También se incrementó la muestra de telespectadores con la que se elaboran los datos de aceptación al pasar de 1.800 cuestionarios remitidos, por término medio, durante, el pasado año a los 3.200 que se envían ahora. El panel de encuestados se renueva en un 25% cada trimestre y todos los panelistas son sustituídos en el período de un año.

El Estudio de Análisis de Contenido e Investigación de Audiencia está efectuando también un estudio sobre la imagen de RTVE. Este departamento será mecanizado e informatizado próximamente, según el proyecto que el director general, José María Calviño, presentó al Consejo de Administración de RTVE, conocido como Plan Integral de Mecanización e Informatización (PIMI).