El Congreso del fútbol no quiere recusaciones ni técnicos extranjeros

El I Congreso del Fútbol Español fue clausurado ayer por el presidente de la Federación Española. Romá Cuyás, secretario de Estado para el Deporte, no asistió al acto de clausura, pero remitió una carta de adhesión. 148 propuestas, acordadas en las dos jornadas anteriores de sesiones preparatorias, fueron sometidas a la aprobación o desestimación por el pleno del congreso. Fueron aceptadas 142. Entre las propuestas más importantes, por sus posibles consecuencias, destacan la prohibición de contratar entrenadores extranjeros, destinar el 10% del importe de los fichajes de jugadores foráneos -por parte de los clubes que les contraten- al fútbol base y la supresión de las recusaciones arbitrales.

Los congresistas acreditados que asistieron al pleno fueron 119, de los que 58 contaron con derecho a voto. El pleno de este congreso consistió en votar a favor, en contra o abstenerse, sin apenas discusión o debate alguno, sobre las propuestas acordadas en las sesiones de trabajo. Las propuestas aprobadas, según fue establecido reglamentariamente, serán asumidas por la Federación Española, que las presentará para su estudio en la próxima asamblea general del fútbol, señalada ya para el 14 de julio. Por tanto, las decisiones y acuerdos aprobados en el Congreso del Fútbol no son vinculantes y, caso de no ser aprobadas por la asamblea general, carecerán de validez y eficacia alguna. Por eso, la suerte de propuestas como las enunciadas anteriormente no sería extraño que fuese la del olvido.

La propuesta que establece "que los clubes contratantes de jugadores extranjeros abonen a la Federación Española un canon de un 10% de la prima de fichaje, que deberá ser destinada al fútbol base", fue aprobada por 53 votos a favor y 2 en contra, uno de ellos el del vicepresidente del Barcelona, Nicolau Casaus.