Romà Cuyàs defiende criterios objetivos para decidir entre Jaca o Granada

Romà Cuyàs, secretario de Estado para el Deporte y presidente del Comité Olímpico Español (COE), declaró en Jaca la necesidad de que el máximo organismo olímpico español pueda decidir en un plazo breve, no posterior a diciembre de 1983, sobre el candidato adecuado para solicitar la organización de los Juegos Olímpicos de Invierno de 1992, candidatura que se disputan las localidades de Jaca y Granada. A este respecto, manifestó que no se admitirán posturas maximalistas ni presiones y que la decisión del COE se hará sobre criterios objetivos.

A las siete de la tarde, en el palacio de Congresos de Jaca, y antes más de medio centenar de periodistas, el presidente del COE mantuvo una conferencia de prensa, en la que reafirmó que la visita que acababa de realizar por Jaca la consideraba muy importante y útil, habiendo comprobado la calidad de las estaciones invernales, para seguidamente señalar que la alternativa que se le presenta al país con la presentación de la candidatura de Granada para esta misma olimpiada, obligaba a redactar un detallado proyecto y que ello no debía ser motivo de fricción entre las dos ciudades. La designación de la sede se realizará con la más estricta objetividad, aunque las condiciones deportivas de cada zona no son totalmente determinantes, sino que influyen otros factores, incluida la propia evolución que pueda experimentarse en cada área hasta el mismo momento de la celebración prevista para 1992.En el turno de preguntas efectuadas por los diferentes periodistas, Romà Cuyàs señaló que los criterios políticos no deben ser decisivos a la hora de esta adjudicación, y que cada ciudad deberá redactar su propio proyecto, en el que se incluirán todos los detalles, y que será, al fin y al cabo, lo que decida en la votación. Respecto a las posibilidades de España para organizar el mismo año dos eventos olímpicos, indicó que no era usual, pero que ya había ocurrido en otras oportunidades, pero sin descartar que en estos momentos son once ciudades las que aspiran en todo el mundo a organizar estos juegos, y que pueden quedar reducidas a ocho, y algunas de ellas con importantes instalaciones y trayectoria en el mundo del deporte blanco.

Respecto a un acercamiento de Granada a Barcelona para hacer un frente común en el tema olímpico, el presidente del COE señaló que tal colaboración había sido solicitada por el Ayuntamiento granadino, y que estaba seguro que si Jaca hacía lo mismo, contaría también con el apoyo y el asesoramiento de la Oficina Olímpica, creada por el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat de Cataluña.

Otro tema que se abordó fue el posible deterioro que pueda producirse con la tardanza en definirse por el Comité Olímpico Español respecto a una de las dos candidaturas, y Romà Cuyàs se mostró de acuerdo en que sería conveniente que este plazo fuese breve, pero para ello deben ponerse de acuerdo, afirmó, ambas ciudades, y si así lo hacen, en este mismo año, como mucho, en diciembre de 1983, podría adoptarse tal decisión, lo que beneficiaría a los trabajos de preparación de conseguir la postura favorable del Comité Olímpico Internacional, a quien corresponde la palabra final.

Ya en la recta final de la conferencia de prensa, se le preguntó sobre algunas posturas y declaraciones sensacionalistas que se han prodigado estos últimos tiempos desde la región andaluza, y a este respecto fue rotundo al señalar que el COE no aceptará posturas maximalistas o fuera de tono, e insistió que los criterios de objetividad presidirán todas sus decisiones.

Con este acto finalizó la estancia en Jaca del presidente del Comité Olímpico Español y secretario de Estado para el Deporte, quien ha podido conocer in situ las posibilidades que ofrecen las cuatro estaciones invernales del Pirineo aragonés con la ciudad de Jaca.