Los 'octavos' de ETA prohíben a los de la VII Asamblea regresar a suelo español

El colectivo de antiguos miembros de ETA Político-militar acogido al plan de normalización negociado entre Euskadiko Ezkerra y el Gobierno y los ministerios de Justicia e Interior del anterior Ejecutivo dio a conocer ayer, en el curso de una conferencia de Prensa realizada en Biarritz, un escrito firmado por la VIII Asamblea en el que se les amenaza directamente si regresan al País Vasco español antes de haberse entrevistado con la dirección de este sector de los polimilis que siguen en la práctica terrorista.

Todo indica que ETApm-VIII pretende otorgarse la facultad de autorizar o no la vuelta de una serie de antiguos dirigentes de la organización político-militar, argumentando razones de propia seguridad. Dichas supuestas razones fueron ayer rebatidas por una veintena de ex militantes de la autodisuelta ETApm-VII Asamblea, que rechazaron las acusaciones de colaboracionismo con la policía vertidas recientemente por ETApm-VIII Asamblea.Joseba Aulestia Urrutia, uno de los portavoces de este grupo que abandonó la lucha armada hace más de un año, calificó de peligrosa la dinámica de acusaciones y amenazas impulsada por la VIII Asamblea, aunque desmintió que se hubieran producido enfrentamientos físicos entre ellos. "Ellos han manifestado que no piensan ejecutarnos de forma inmediata porque no poseen por el momento la suficiente cobertura política" señaló Joseba Aulestia, Zotza. Fernando López Castillo, Txiki, afirmó que la campaña de desprestigio va dirigida, de un lado, a hacer fracasar la salida negociada que posibilita la vuelta a la normalidad, y de otro, a intentar camuflar el fracaso cosechado por los octavos a la hora de encontrar un respaldo y un proyecto político.

En un escrito entregado a los informadores, el colectivo de antiguos miembros de ETApm pone de relieve la falta de concreción y el carácter ambiguo de las acusaciones lanzadas por los octavos, cuya actividad considera ridícula desde un punto de vista tanto político como militar. "El acoso en el que se encuentran les hace buscar enemigos y confidentes para justificar su fracaso político, ya que no representan a nadie más que a sus intereses particulares de supervivencia". En relación con las amenazas, el grupo de antiguos militantes de la VII Asamblea, señala: "Este tipo de actuaciones es más propio de policías privadas, que defienden el orden particular de su grupo y que abocan en reprimir la libertad de toda persona a decidir su propio camino político, que de militantes que se autodenominan revolucionarios. Exigimos para nosotros el mismo respeto que concedemos a otras opciones políticas, y no habrá amenazas, difamaciones o chantajes que consigan cambiar nuestra decisión".

Tras reafirmarse en el análisis de la situación política en Euskadi, el colectivo de antiguos polimilis valora positivamente el desarrollo del plan de normalización, del que se han beneficiado hasta el momento más de medio centenar de presos y exiliados, la mitad aproximadamente del total de personas incluidas en las listas negociadas. El resto, al que se han sumado últimamente algunos presos y exiliados anteriormente posicionados con la VIII Asamblea, podrá legalizar su situación antes de este verano o, a más tardar, antes de las próximas navidades, según señaló ayer Juan Miguel Goiburu Mendizabal.