Arsenio Lupin

El superladrón de guante blanco redivivo, y con sólo dos años y medio edad, acaba de ser atrapado con las manos en la masa por la policía de Jerusalén. Se trata del caco más joven de Israel y probablemente del mundo, cuyo nombre verdadero no ha sido dado a conocer, en virtud de las leyes de protección de menores. El chiquillo había logrado desvalijar gran parte de la juguetería de su parvulario en varias operaciones, para las que era instruido por dos niños de nueve años, según confesó en el interrogatorio policial, "después de quitarse el chupete de la boca". En su denuncia, la maestra del parvulario destacó que "el ladrón no dejaba rastros", por lo que la policía decidió tenderle un anzuelo: un juego de operaciones matemáticas con computadora y luces de colores, lo que permitió seguirle y detenerle, tras una rocambolesca celada, en el mejor estilo de las novelas de Arsenio Lupin. Según un portavoz de la policía, el ladronzuelo realizaba sus atracos con gran habilidad pues, después de romper el vidrio de la ventana por la que hacía su escalo, limpiaba concienzudamente el suelo de cristales rotos y borraba todas las pistas.