Los obispos deploran las reacciones a su pastoral sobre la LOAPA
El obispo auxiliar de Bilbao deciaro ayer que las reacciones de determinados partidos a la pastoral sobre la LOAPA le "apenaban profundamente", sobre todo cuando se trata de cuestiones "tan vidriosas como la LOAPA". Por su parte, el obispo de Vitoria dijo: "El Concilio nos dice que la Iglesia puede y debe dar su juicio moral sobre materias referentes al orden político, y es lo que hemos hecho."El obispo auxiliar de Bilbao, Juan María Uriarte -que participó en la manifestación convocada por el Gobierno vasco y los partidos PNV, PSE, Euskadiko Ezkerra y PCE contra el terrorismo, el pasado mes de mayo, en señal de protesta por el asesinato del ingeniero de Lemóniz Angel Pascual-, se mostró cauteloso al ser preguntado sobre el texto colectivo de los prelados vascos.
En unas declaraciones concedidas a EL PAIS señaló que prefería no entrar a discutir el contenido del texto, "para evitar posibles desviaciones del mensaje", y agregó: "Preferimos que lo juzgue el pueblo. Las reacciones de determinados partidos no nos han sorprendido. Casi siempre nuestras pastorales han provocado polémica. Para nosotros es justo iluminar la vida del país con documentos de este tipo".
Mucho más preciso fue el obispo de Vitoria, José María Larrauri, quien señaló que las críticas a la intromisión de los prelados en política "es ya muy vieja". En opinión del obispo, "a muchos les gustaría que la Iglesia se metiera en la sacristía, pero nosotros nos remitimos a lo que decían los apóstoles: antes hay que obeceder a Dios que a los hombres. El Concilio nos dice que la Iglesia puede y debe dar un juicio moral sobre materia referente al orden político, y es lo que hemos hecho. Nosotros no enjuiciamos la LOAPA bajo aspectos jurídicos, sino éticos. Ahí le encontramos fallos."
En 1976, desde que Cullarte fue nombrado obispo auxiliar de Bilbao -cuando Añoveros ostentaba el cargo supremo de la diácesis- comenzó a fraguarse en la Iglesia vasca un movimiento renovador.
En 1978 los obipos de Bilbao, Pamplona, San Sebastián y Vitoria emitieron su primer documento conjunto en favor de la paz y contra la violencia, y otro un año más tarde, en un texto mayoritariamente aplaudido. En 1979 dieron a conocer también un documento contra la violencia, muy bien recibido. En abril del pasado año, los obispos de las tres capitales vascas dieron a conocer una pastoral en la que condenaban "las acciones subversivas de ETA y las medidas represivas del Gobierno".
