Argentina saldrá con suplentes ante Checoslovaquia
La situación planteada con los jugadores internacionales del River Plate no parece estar superada del todo. La sanción que les impuso la Federación Argentina, a instancias del club, fue reducida para permitirles jugar ante la República Federal de Alemania, en el partido más importante que disputará el equipo de César Luis Menotti antes del Mundial-82. Los futbolistas albergan la esperanza de ser indultados hoy mismo, para enfrentarse a Checoslovaquia en Mar del Plata. De no ser así se negarían a pagar la indemnización económica, que favoreció la reducción de la pena de cuarenta y cinco a treinta y cinco días.
La mediación del presidente de la AFA, Julio Grondona, surgida tras largas conversaciones con el seleccionador César Luis Menotti, permitió la presencia anticipada en la selección de Fillol, Passarella, Gallego, Olaerticochea, Kempes y Ramón Díaz. Todo parece indicar que los aficionados se quedarán sin ver a los internacionales del River en el partido de hoy contra Checoslovaquia, que acaba de empatar a uno con Brasil, en Sáo Paulo. De todos modos, no debe descartarse un indulto de última hora por más que César Luis Menotti haya ensayado en estos días con un equipo suplente, y difícilmente cambie a último momento.El técnico argentino considera que lo conseguido era todo a lo que se podía aspirar, y ya no piensa en los sancionados. Estos, por su parte, no dan por perdida la batalla y, a través del sindicato de futbolistas, continúan presionando. La solución acordada fue que los jugadores deberán resarcir al River Plate de los daños económicos que se originaron cuando el equipo no se presentó a jugar en Montevideo, ante el Peñarol, un partido amistoso por una de las Copas de verano en Mar del Plata.
La suma estipulada ronda los cuatro millones de pesetas y la abonan los jugadores internacionales junto con el resto de los compañeros de la plantilla del River Plate, que fueron a la huelga al exigir 100.000 pesetas de retribución por la victoria ante el Peñarol, en lugar de las 80.000 pesetas que les ofreció la directiva. Los jugadores del River Plate aceptaron en principio esta última cantidad.
Los futbolistas adoptaron las medidas de fuerza al no poder percibir el sueldo de enero y las primas por ganar el campeonato nacional de 1981. Al final, los grandes triunfadores resultaron ser los directivos por cuanto no sólo se descontarían los cuatro millones de pesetas de la deuda que mantienen con la plantilla sino que, además, no tendrán que abonarles el sueldo durante los 35 días de: inhabilitación deportiva. Los futbolistas sufrieron doble castigo. Pero la historia no terminará allí seguramente. Las negociaciones continúan. Por un lado, los jugadores internacionales del River Plate pidieron jugar contra Checoslovaquia, como condición para entregar los cuatro millones de pesetas, aún al saber que eso es casi imposible.
Al no tener eco la propuesta, ahora han desafiado a los directivos del River Plate, al golpearles donde más les duele, exigiéndoles la cancelación inmediata del resto de la deuda, una vez deducidos los dólares que detuvieron el trabajo de la selección durante varios días.
César Luis Menotti anunció que el equipo argentino saltará al campo a enfrentarse a Checoslovaquia con el siguiente equipo: Baley, del Talleres de Córdoba; Olguín y Trossero, del Independiente; Van Tuyne, del Racing; Gordillo, del River Plate; Barbas, del Racing; Bulleri, del River Plate; Hernández, del Estudiantes; Calderón, del Independiente; Maradona, del Boca Juniors, y Valencia, del Talleres de Córdoba.
Los dirigentes de la selección de Checoslovaquia, según informa la agencia Efe desde Mar del Plata, expresaron su disconformidad con el hotel donde fue alojada. Los directivos checos reclamaron un alojamiento con piscina y comedor exclusivo, y entrenar en el escenario del encuentro. Esto les fue negado. Hasta ahora, ni Argentina ha entrenado allí.
