_
_
_
_

Las nuevas tarifas postales mantendrán el déficit de Correos

La Dirección General de Correos espera que la subida de algunas tarifas postales aprobada el viernes por el Gobierno le depare un aumento de ingresos próximo a los 4.000 millones de pesetas. Así, podrá mantener en cifras absolutas, o incluso reducir algo, el déficit de explotación, una vez contada como ingreso la subvención por servicio. La diferencia entre gastos e ingresos fue de 4.500 millones de pesetas en 1981, año en que se logró modificar su tendencia al alza.Tras recibir el informe favorable de la Junta Superior de Precios y la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos, se esperaba que la subida entrara en vigor el primero de abril. La fecha permanece en blanco, dentro de la correspondiente disposición, y algunas esferas de Correos quieren anticiparla, debido a que cada mes de retraso detrae los ingresos en casi 500 millones de pesetas al mes. Los anteriores reajustes fueron aprobados en agosto de 1979 y 1980 y en febrero de 1981.

Además del ya conocido incremento de 12 a 14 pesetas en los sellos para cartas interurbanas (en febrero de 1981 pasaron de 10 a 12 pesetas), se iniciará la reordenación del sector de impresos, con subida de 3 a 5 pesetas para los de difusión cultural. Las cartas extranjeras registrarán incrementos del 10 al 14,3% (de 30 a 33 pesetas en sellos para el Continente). Los servicios de telecomunicación alcanzarán en promedio el 14% (la incidencia será para télex un punto superior). Por último, destaca en el nuevo cuadro de tarifas la elevación de 35 a 40 pesetas en la cuota fija de los telegramas, cuyo precio por palabra se mantiene en 3 pesetas.

Nuevas rutas

Tampoco suben, entre otras, las tarifas para cartas y postales urbanas, ni los impresos sin dirección, ni envíos de segundo curso con peso superior a 500 gramos, ni el giro nacional, cuya expedición y recepción será simplificada. Este último caso lo justifica el Gobierno en la necesidad de favorecer a las clases con menores rentas. En la misma línea, será creado un servicio de radiotélex y telegramas simplificados.

La estabilidad de las urbanas trata de explicarse en que desaparecerán los gastos de transporte y serán reducidos los de manipulación. Sin embargo, no es ajena a esta decisión, según otras interpretaciones, el intento de frenar la creciente ganancia de cuotas de mercado por parte de las empresas privadas que ofrecen mayor eficacia y menor coste, sobre para los envíos de grandes empresas.

Según las estimaciones de la Dirección General de Correos, los aproximadamente 4.000 millones de pesetas que supondrán las variaciones de tarifas pueden situar el déficit del servicio algo por encima de los 4.300 millones de pesetas previstos en un principio, debido a la demora de su entrada en vigor. Pero se confía en obtener una cifra inferior incluso en términos absolutos a los 4.600 millones de déficit de explotación en 1981. Los gastos del presente año han sido presupuestados en 62.600 millones de pesetas, mientras la estimación de ingresos se ha quedado en 58.300 millones. En 1981, unos fueron 56.900 millones (es decir, 5.700 millones de pesetas menos) y los ingresos 52.300 (también en cifras redondas, 6.000 millones de pesetas menos).

Con las oscilaciones en la demanda y los 500 millones de pesetas dejados de ingresar por el citado retraso, los responsables de Correos consideran difícil que puedan cumplirse tales presupuestos. Sin embargo, después de haber frenado el déficit, logro atribuido al aumento de productividad y a la política seguida en los tres últimos años de ajustar las tarifas a los costes reales, esperan avanzar en sus tres objetivos fundamentales: absorber el incremento de los costes de explotación (Correos tiene casi 60.000 trabajadores retribuidos como funcionarios), reducir el déficit y corregir tendencias perniciosas en la demanda.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_