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GP de Las Vegas de Fórmula 1

El título mundial se resuelve mañana en el aparcamiento de un hotel

Un extraño circuito, creado en el aparcamiento del hotel Caesar Palace, en Las Vegas (Estados Unidos), será mañana el escenario de la última y decisiva carrera del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 de esta temporada. El argentino Carlos Reutemann, líder del mundial; el brasileño Nelson Piquet, a sólo un punto del anterior, y el francés Jacques Laffite, a seis puntos del primero, se jugarán, a una sola carta, el título mundial.

El trazado del circuito norteamericano no es el más apropiado para disputar una carrera de fórmula 1, y mucho menos con el título mundial en juego. Cualquier incidente debido al circuito que pueda producirse será esgrimido por los perdedores para intentar impugnar al vencedor.Pero no es sólo su trazado lo que invalida al circuito donde mañana se disputará el Gran Premio de Las Vegas. La escasa seguridad de la pista artificial y la forma como se ha escogido esta carrera para formar parte del calendario del mundial dejan muchísimo que desear y ponen en evidencia, una vez más, las muchísimas lagunas que existen en la Federación Internacional y en la comisión de fórmula 1.

Ante muchísimo público que acudirá atraído por la emoción del desenlace final, y ante los clientes del hotel, a los que la carrera se les ofrece casi como una atracción más dentro del programa, como si fuera un restaurante exótico, una sauna de cualquier tipo, una actuación del cantante de moda o la siempre atractiva ruleta, Reutemanri, Piquet y Laffite tendrán que dirimir sus diferencias.

De los tres, el que peor lo tiene es el francés. Su coche, el Talbot, parece haber alcanzado en las últimas carreras un punto de puesta a punto óptimo, pero, por contra, Laffite tiene que recuperar seis puntos de desventaja Para aspirar al título, Jacques Laffite tiene que terminar entre los dos primeros clasificados, y aun así, en algún caso, tendría que esperar el resultado de sus rivales.

La lucha más cerrada se centrará en Piquet y Reutemann Con un solo punto de diferencia entre ambos, a favor del argentino, el que mejor acabe de entre ellos puede ser el nuevo campeón mundial. Aunque ninguno de los dos gane la carrera.

Trazado desconocido

El problema que presenta este circuito norteamericano para los tres pilotos en liza es, de una parte, el desconocimiento de su trazado para todos ellos. Sólo cuando se ha rodado durante muchas horas sobre una pista se llega a conocer exactamente el límite de la misma, pese a que estos pilotos tienen ya tal costumbre de asimilar un circuito nuevo que, con unas cuantas vueltas, pueden rodar próximos a dicho límite. Pero, para limar esas centésimas de segundo en cada curva que, al final, se convierten en la diferencia de décimas en una vuelta completa, que permite estar en cabeza o en la zona media de la parrilla, se precisa mucho tiempo de trabajo, que los pilotos no han tenido en esta ocasión por la forma como ha sido escogida esta carrera y por su emplazamiento.

El otro gran problema que tendrán que superar los tres en disputa por el título es el de los adelantamientos. En una pista como la del aparcamiento del hotel Caesar Palace, de Las Vegas, los adelantamientos serán más difíciles aún que en el Jarama, y comparables a los de Montecarlo, donde hay que esperar a un error de pilotaje grave o a una avería para que puedan producirse. La parrilla, por tanto, puede ser decisiva.

En la táctica de marcajes que tendrán que adoptar Reutemann, Piquet y Laffite, sin que ésta excluya el atacar a fondo, puede que algún otro salga beneficiado y sea el que gane la carrera. El australiano Alan Jones, que cederá su título el sábado y que aún no ha decidido si sigue; el británico Watson y algún otro podrían ser los favorecidos.

Reutemann, el más veterano

De los tres máximos aspirantes al título mundial, el argentino Carlos Reutemann, que manda tras el Gran Premio de Canadá, penúltima prueba del campeonato, con 49 puntos -por 48 del brasileño Nelson Piquet y 43 del francés Jacques Laffite-, es él que tiene el historial más dilatado. A sus 39 años ha corrido 143 grandes premios, con doce victorias. Piquet, sin embargo, con veintinueve años, posiblemente le supere.ya en brillantez, pues con sólo 48 pruebas disputadas ha ganado seis, el mismo número que Laffite, el cual ha participado, en cambio, en 107.

En la actual clasificación del Mundial de Fórmula 1, a continuación de los tres pilotos citados están el galo Alain Prost y el australlano Alan Jones, con 37 puntos; Watson, con veintisiete, y Villeneuve, con veinticinco. Prost, con sólo veintiséis años, tiene ya tres victorias, únicamente en veinticinco pruebas. Watson, con 35, y 121 grandes premios, sólo ha ganado dos. Villeneuve, con veintinueve, ha corrido 62 y ha ganado seis, como Piquet y Laffite. El austriaco Niki Lauda, que acaba de anunciar su vuelta a las pistas a sus 32 años, es el que más triunfos ha obtenido entre los pilotos actuales con más de cien pruebas disputadas. De 113 ha vencido en diecisiete.

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