Un servicio de distribución por medio de cisternas paliará la falta de agua de Alcalá de Henares

Cisternas para distribución de agua potable a zonas con insuficiencia de abastecimiento han comenzado a aparecer en las calles de Alcalá de Henares, donde ha sido prohibido el riego de jardines con agua de estas características, y el Ayuntamiento va a proceder a regar las zonas verdes con agua no potable. El problema radica en que la red de abastecimiento de la población, construida hace diez años, es totalmente insuficiente para servir agua a los 200.000 residentes de la localidad.

Días pasados fueron adjudicadas las obras de construcción de un desdoblamiento de la red, pero su finalización no tendrá lugar hasta dentro de un año, por lo que el problema de este verano no se resuelve, y los alcalaínos ya han comenzado a pasar sed.La Corporación municipal celebrará la próxima semana un pleno extraordinario para tratar el tema del agua y estudiar la situación que atraviesa la localidad, que los últimos años ha padecido continuos problemas en este sentido. El pasado jueves, cuando se intentaba celebrar otro pleno municipal, interrumpieron la sesión unos 150 vecinos que exigieron se tratase el problema de la falta de agua. Miembros de la Corporación explicaron la situación y el pleno finalizó sin llegar a estudiar el orden del día, que fue aplazado.

La situación actual, según señalaron fuentes municipales, parte de las tres averías consecutivas sufridas recientemente en la red. Esto impidió que se acumulasen reservas para evitar el desabastecimiento. Por ello, el agua que llega a Alcalá pasa directamente a los usuarios sin conseguir una mínima acumulación en los depósitos municipales. Y mientras Alcalá necesita unos mil litros por segundo de caudal en sus tuberías, la red existente sólo tiene capacidad para distribuir trescientos litros por segundo. Esto, unido a las altas temperaturas que se alcanzan en las últimas fechas, representa el agravamiento del problema de todos los veranos.

Las tuberías de desdoblamiento conseguirán una aportación de trescientos litros por segundo más. La adjudicación de las obras también ha suscitado cierta polémica, entre otras cosas por el retraso que ha sufrido. Ante el paso del tiempo sin ver el inicio de las obras, representantes del Ayuntamiento se entrevistaron con el director general de Obras Hidráulicas, Juan Ruiz, y el director general de la Confederación de Aguas del Tajo, Enrique Carrasco. Tras estos encuentros se procedió a la adjudicación de las obras, una vez realizada la expropiación de los terrenos que ha de atravesar la red. Pero las condiciones de adjudicación no parecen muy favorables para Alcalá. El plazo de construcción está fijado en un año, mientras que en el Ayuntamiento señalan que se puede acortar tiempo en la obra, y en la subasta se concedió la edificación a Construcciones y Contratas, que pujó a la baja, alrededor de un 40%, respecto a la propuesta inicial, lo que en Alcalá consideran baja temeraria.

En la actualidad, muchas zonas de Aleclá solamente reciben agua tres o cuatro horas durante el día y durante gran parte de la noche. Sin embargo, mientras en otras ocasiones este tiempo era suficiente para llenar los depósitos de muchas urbanizaciones, el vacio producido por las averías recientes ha impedido que esto se consiga ahora.

Alcalá es probablemente la cuarta población castellana en número de habitantes, después de Madrid, Valladolid y Leganés. El aumento que ha experimentado la población ha significado un porcentaje superior al mil por ciento en los últimos diez años. Precisamente en esos años fue construida la red actual de abastecimiento, que se ha hecho insuficiente desde el principio, pues ya se preveía un aumento espectacular del número de residentes. Guadalajara, con una red construida al mismo tiempo, cuenta para su abastecimiento con una capacidad tres veces mayor, mientras su población es la tercera parte de Alcalá.