La duquesa de Fernández Miranda,

viuda de Torcuato Fernández Miranda y Hevia, acudió al palacio de la Zarzuela, donde fue recibida por el rey Juan Carlos, acompañada de sus hijos. El motivo de la audiencia fue devolver al rey el Toisón de Oro, condecoración concedida por el Rey cuando dimitió corno presidente de las Cortes, hecho ocurrido el 31 de mayo de 1977, un mes antes de celebrarse las primeras elecciones democráticas. Según el reglamento de la orden del Toisón de Oro, éste debe ser devuelto cuando fallece la persona que lo ostentaba.