Los futbolistas no se fían de las letras del Levante

Representantes de la Asociación de Futbolistas -el presidente, Quino, y el coordinador general, Esteo- mantuvieron ayer una reunión con directivos del Levante, con el fin de concretar la solvencia de los avales firmados para pagar la deuda de veintiséis millones de pesetas que el club mantiene con dieciséis ex jugadores y con otros cuatro de su actual plantilla. Los futbolistas siguen desconfiando de poder cobrar, y hoy, en Madrid, se intentará conseguir avales de mayor solvencia.La huelga anunciada para este domingo sigue pendiente de que se resuelva este asunto, así como de que se lleve adelante mañana, por parte de la directiva de la federación, la convocatoria de una asamblea extraordinaria que trate el tema de los sub-20. El Levante fue uno de los clubes que consiguió saldar a última hora sus deudas con los jugadores, a través de unas letras avaladas por algunos de sus directivos, aunque siempre con la condición de que fueran aceptadas esta semana por los jugadores. Estos mantienen su desconfianza, escarmentados por otras situaciones negativas precedentes. El anterior presidente del club, Santiago Sanz -multimillonario, con yate incluido-, también aváló en su momento determinadas cantidades, y los jugadores, en la práctica, tampoco pudieron cobrar.

La Asociación de Futbolistas, asimismo, hizo público un comunicado en el que «asume la responsabilidad absoluta de la convocatoria de huelga». Señala que «en la AFE nunca se han dado injerencias políticas, ya que si se diesen se iría contra los estatutos de la asociación». Se rechaza también «la calificación de esta huelga como política y apoya totalmente la gestión de Cabrera Bazán como su asesor jurídico».

Desde diversos ángulos se ha intentado acusar de un matiz político a la convocatoria de huelga para el día 14, y en concreto a Cabrera Bazán.