La policía descarta un posible atentado terrorista

El sepelio de los marqueses de Urquijo, que serán inhumados en el panteón familiar del cementerio de San Justo, de Madrid, tendrá lugar a las seis de la tarde de hoy. Hacia las dos de la tarde de ayer los féretros, con sus cuerpos, fueron trasladados al depósito de cadáveres de Pozuelo de Alarcón, donde poco después se realizó la autopsia. Se da la circunstancia de que Pozuelo no dispone de furgón fúnebre oficial, y los restos mortales de los marqueses tuvieron que ser trasladados en la furgoneta particular de una casa comercial. Previamente al sepelio, probablemente se celebre una misa en el mismo chalé.Poco después de las cinco de la tarde de ayer llegó a la residencia familiar el hijo de los marqueses, Juan, de veintidós años, que se encontraba estudiando en Londres Allí se reunió con su única hermana, Mirian. Fuentes próximas a la familia de los fallecidos han señalado que los marqueses habían adelantado su regreso a Madrid, ya que tenían prevista su llegada la próxima semana. Asimismo, otras fuentes señalaron que habían sido amenazados en varias ocasiones y que, a pesar de haber solicitado protección, no se les había concedido, aunque esto ha sido desmentido por el Ministerio del Interior.

Tanto la policía, que investiga el caso, como algunos familiares, han manifestado que los asesinos conocían perfectamente la casa y fueron directamente al dormitorio. Fuentes policiales han descartado la tesis de un posible atentado terrorista y se inclinan por un delito común, debido al tipo de armas.