El sector radical de USO acuerda su integración en Comisiones Obreras

El mapa sindical español puede quedar radicalmente modificado si se confirma la integración del sector radical de USO en CCOO. La noticia, distribuida en la tarde de ayer por Europa Press, no pudo ser confirmada ni desmentida por la ejecutiva de CCOO, uno de cuyos miembros -interrogado por EL PAIS- no quiso hacer comentarios sobre la mencionada integración.

La agencia, que basa la noticia en fuentes informadas, asegura que el acuerdo de integración se fraguó en varias reuniones mantenidas últimamente entre Nicolás Sartorius, secretario de Relaciones Políticas y Unitarias de CCOO, y José Corell, responsable del mismo departamento en USO, y concretamente en la realizada el pasado lunes día 3.El sector radical, que encabeza José Corell, ingresará en CCOO como una corriente socialista organizada y autogestionaria, que se ha plasmado en una sociedad anónima creada recientemente por miembros de dicho sector y que se denomina Centro de Debate y Estudios Sindicales Autonomía Obrera (Cedes).

José Corell, de acuerdo con las mismas fuentes, propuso hace tiempo al secretario general de USO, Manuel Zaguirre, que dicha corriente funcionara dentro de este sindicato, a lo que el señor Zaguirre se opuso, por entender que ello facilitaba la desintegración de USO, que no admite corrientes organizadas dentro de su seno.

Este Centro de Debate y Estudios Sindicales Autonomía Obrera «es un lugar de encuentro y de conexión entre todos aquellos que nos proclamamos socialistas y autogestionarios y queremos profundizar y avanzar en la lucha por la democracia socialista», según explica una hoja informativa. Añade que no es una forma de evasión de la lucha sindical y que están por la unidad de la izquierda, no por su atomización.

De acuerdo con las mismas fuentes, Cedes es un intento de aglutinar a todo el sector radical de la USO, evitar su dispersión y entrar de esta manera en CCOO, como un ente organizado.

Han añadido que el acuerdo entre los radicales de USO y CCOO tiene dos objetivos claros: primero, adornar de pluralismo a CCOO, que tiene una imagen sindical cerrada comunista. Se celebraría incluso un congreso extraordinario para recibir a los nuevos militantes con gran pomposidad. Y, segundo, ofrecer una imagen de una USO derechizada, inexistente, de nula representatividad.

Según las citadas fuentes, la situación actual es muy similar a la originada en 1977, cuando un sector de USO se integró en UGT. En esa ocasión, Nicolás Sartorius ofreció al otro sector su ingreso en CCOO, que no fue aceptado por considerar que de producirse desaparecía el sindicato autónomo, contrario a configurarse como correa de transmisión de un partido, en este caso, el PSOE y PCE.

Han señalado que, sin embargo, dentro del sector radical ya ha habido enfrentamientos por la negativa de algunos militantes a ingresar en CCOO, a pesar de que están dispuestos a hacer todo lo que sea contra Manuel Zaguirre.

Así, en Vigo se ha creado una central sindical gallega a raíz de la escisión con USO. En Cádiz se han fundado colectivos socialistas autogestionarios. En Asturias, se formará un sindicato independiente. Y en Madrid, el Partido Sindicalista, hasta ahora en USO, ya ha dicho no a su ingreso en CCOO. De este partido forma parte Francisco Zugasti, miembro de la ejecutiva de USO, que dimitió por no estar de acuerdo con la política de derechización de Manuel Zaguirre.

Las referidas fuentes han precisado que esta crisis interna de USO provocará una salida de unos doscientos militantes con algún cargo en el sindicato, aunque a nivel de afiliación, sus efectos serán mínimos.

Por otro lado, el sector de Zaguirre tiene previsto enviar unas 300.000 cartas a otros tantos militantes explicándoles la situación.