"Alinear a dos menores de veinte anos es una patada al fútbol"
«La obligatoriedad de alinear a dos jugadores menores de veinte años en Segunda División debe ser suprimida. Además de que es una auténtica patada al fútbol, no estuvo nada claro en el pleno el recuento de votos, como así se hizo constar, en su momento, sin que se hiciera caso desde la presidencia». Son palabras de José María Zárraga, gerente del Alavés. Varios clubs de esta categoría estudian la posibilidad de elevar un recurso a la Federación. «El tema debe ser impugnado.»
En el maremágnum final de aprobaciones «porque sí» de la mayoría de los temas que debieron tratarse en la última parte de la pasada asamblea futbolística, el de la obligatoriedad de alinear en las categorías nacionales, salvo en Primera, a dos jugadores menores de veinte años encontró oposición en determinados representantes de los clubs afectados. La confusa vótación llevada a cabo desde la presídencia originó las protestas de los representantes en ese momento, y la retirada posterior y casi masiva del resto cuando intentaron replantear el asunto a Porta. « La votación no se ajustó a la realidad», señala Zárraga. «No estamos conformes con ella. ¿Pero han pensado en lo que puede representar esta medida? Van a obligar a los entrenadores a que saquen a dos chicos y los retiren poco después, con el perjuicio que ello puede ocasionar si hay una lesión posterior de otro jugador. La medida en Segunda B y Tercera puede afectar menos, pero en Segunda, con el grado de profesionalidi4d que existe y las necesidades de triunfo de los equipos para satisfacer a sus aficiones, el tenia es muy negativo. Es como si impusieran al entrenador que alinease a un manco o un cojo, por ejemplo. Esto no puede ser.»Los representantes de los clubs que abandonaron el pleno fueron, entre otros, los del Alavés, Levante, Castellón, osasuna, Santander, Huelva y Getafe. Alguno más, como Granada y Cádiz, apoyan la negativa. Hay clubs, sin embargo, que por los contactos mantenidos por Zárraga y por Francisco Rojas, gerente del Levante, no parece que vayan a adherirse al previsible recurso. Entre éstos se encuentran, al parecer, el Coruña -su presidente, Antonio Alvarez, es directivo de la Federación-, Castilla, Valladolid, Palencia y Oviedo.
Precisamente, Rojas, gerente del Levante, intentó en la asamblea que se estudiara y matízara, el asunto. Llevaba un estudio técnico desde el punto de vista del entrenador. Porta le dijo que ya no podía tratarse porque el tema había sido aprobado. Esto originó la señalada salida dejos clubs de Segunda. En concreto, el Levante quería exponer, entre otras cosas, el artículo séptimo del contrato de los entrenadores, que señala que «la confección de la lista de jugadores convocados para los partidos, así como la designación de los que deben alinearse corresponderá exclusivamente al entrenador». En la práctica parece claro que a los técnicos se les coaccionará cuando tengan que designar sus respectivas formaciones.
Se ha señalado que, en este tema, el presidente del Colegio de Entrenadores, Manuel Alepuz, no defendió la postura de éstos. Al respecto, Alepuz señaló a EL PAIS que «no es que esté de acuerdo con lo acordado. En fin, bueno, habrá que esperar a ver cómo se desenvuelve el tema; vamos a esperar a la práctica, y luego se estudiará. En el pleno yo estaba obsesionado con defender puestos de trabajo porque las federaciones regionales querían suprimir la obligatoriedad de entrenadores titulados en la primera regional y juveniles».
Una circunstancia similar -aprobar primero y tener que matizar después- se dio hace escasas fechas en el tema televisión. Lo que resulta evidente es que la puesta en práctica de esta medida va a acarrear dificultades. Algunos clubs consultados han señalado que en estos momentos no tíenenjugadores en esas condiciones para formar en el equipo titular. Y hay más situaciones complejas que pueden producirse. El propio gerente del Madrid, Fernández Trigo, aunque a su club no le afecta la medida, también manifestó su opinión de que éste, como otros temas, debía haberse matizado con profundidad en el pleno.
