Animales y plantas para niños y adultos
Se han escrito libros sobre todos los temas posibles: los animales y las plantas son dos de ellos, esos dos grandes reinos de la Naturaleza de los que el hombre se nutre y no sólo en su biología. También en su sensibilidad y en sus conocimientos.
El mundo de los animales, de la mano de las editoriales tradicionalmente infantiles, está dirigido a los niños: hermosas fotos, muchas veces la voz conocida de Félix Rodríguez de la Fuente, otras la biografía menos ideológica para enseñar a los niños a amar el mundo.Las plantas han tenido suerte en la feria de este año. Además de aparecer ocasi...
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Se han escrito libros sobre todos los temas posibles: los animales y las plantas son dos de ellos, esos dos grandes reinos de la Naturaleza de los que el hombre se nutre y no sólo en su biología. También en su sensibilidad y en sus conocimientos.
El mundo de los animales, de la mano de las editoriales tradicionalmente infantiles, está dirigido a los niños: hermosas fotos, muchas veces la voz conocida de Félix Rodríguez de la Fuente, otras la biografía menos ideológica para enseñar a los niños a amar el mundo.Las plantas han tenido suerte en la feria de este año. Además de aparecer ocasionalmente en los escaparates de muchos libreros, hay un stand dedicado a ellas, aunque hay que decir que en su aspecto más práctico.
La importancia del clima
María Socorro Mármol, que se encarga de este stand, dijo a EL PAIS: «En este terreno hay desde los libros más divulgadores a las "cosas más serias", estudios biológicos, guías de plantas, etcétera.» Los libros de esta materia se dividen en, por lo menos, tres terrenos: el primero ocupa flores, plantas, huertas y jardines: si usted quiere cuidar sus propias macetas o plantar el arbolito, ahí tiene el libro que le servirá de guía. Hay muchos. «El problema», dice Socorro Mármol, «es que como en su mayoría son traducciones, falta la traducción del clima. Y como el clima de Alemania, por decir un caso, es tan distinto al de Andalucía, los que quieran llevar a la práctica lo que los libros explican al milímetro se tienen que andar con ojo.»
El segundo terreno es el de la medicina natural, de resultas de los de todas esas plantas que curan dolores, suavizan males y son depositarias de una vieja ciencia anterior incluso al hecho libro. «Ahora», teoriza Socorro Mármol, «está en auge este terreno de la medicina natural de resultas de los movimientos naturistas y del desencanto hacia la civilización industrial capitalista posterior a 1968».
«Me gustan», dice, «los libros que indican cómo recoger, buscar, conocer, cuidar las plantas silvestres, medicinales o no; por ejemplo, Cómo y cuándo recoger las plantas medicinales naturales, de Eugenio G. Vaga, de la editorial De Vecchio. Porque proponen una forma de vida natural. Eso al margen de las místicas y las moralinas, que también hay».
Por fin, otro terreno que llama la atención es el de las plantas misteriosas, esas que ayudan a volar. De antiguo, los viejos médicos consideraron que algunas plantas fortalecían los terrenos de las pasiones y abrían las vías de la perfección. «Te puedo contar cosas divertidas sobre la represión que la gente siente hacia estos libros: cogen éste (Los afrodisiacos naturales, de R. Aldeman) y éste (Manual para el cultivo de la marihuana, de editorial Rosenthal) y le añaden cualquier otro como para taparlo. Ponme estos tres. »
La caseta especializada de la librería Becas Universitarias es una de las varias que existen en la feria dedicadas a un solo tema. La propia librera comenta a EL PAIS: « Diez días antes de que comenzara la feria los libreros recibimos una circular del INLE en la que se proponían a concurso varias casetas a condición de que los libreros propusiéramos temas monográficos que no fuesen los de siempre, es decir, técnicos o jurídicos. A mí se me ocurrió éste de las plantas y las flores, y estoy muy contenta porque el resultado es una curiosa forma de relación con los lectores, con los compradores, que vienen aquí a hacer tertulia más incluso que a comprar los libros. He vendido en ésta el doble que en la otra que también traigo, y en la que llevo temas generales.»