Los socialistas catalanes no pactarán ni con UCD ni con CD

El consell nacional del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC-PSOE) ha aceptado la resolución de su comisión ejecutiva nacional, reunida el pasado fin de semana en el local central de la UGT de Barcelona, consistente, principalmente, en no realizar ningún tipo de pactos, cara a la elección de alcaldes, con «aquellas fuerzas políticas o candidaturas que representan el continuismo político o los mismos intereses que durante años han dominado en nuestros ayuntamientos: Coalición Democrática, Unión de Centro Democrático y otras fuerzas de derechas».El consell nacional procedió a una valoración del resultado de las elecciones municipales, tras escuchar un amplio informe al respecto del primer secretario del partido, Joan Reventós. Posteriormente, estableció las normas para la elección de los miembros socialistas de las comisiones municipales permanentes y de las diputaciones provinciales.

Respecto a la política de pactos municipales, aprobó dos resoluciones. En la primera se afirma que «estas elecciones municipales han confirmado nuevamente a los socialistas como primera fuerza política de Cataluña y, en consecuencia, como eje vertebrador de una política de progreso que, a la vista de la voluntad mayoritaria del electorado, tiene que llevarse a cabo en la vida municipal catalana».

Más adelante se afirma que «los socialistas tomamos la iniciativa de proponer pactos municipales de progreso a. aquellas fuerzas de la izquierda y democráticas con las que se dan mayores coincidencias de programa». Tras rechazar los pactos con CD y UCD, en la resolución se anuncia que el PSC-PSOE establecerá los pactos municipales sobre las siguientes bases:

1. El apoyo para las alcaldías del primero de la lista más votada de entre los partidos o fuerzas pactantes en cada municipio.

2. La formalización de estos pactos de gobierno municipal podrá realizarse entre varias fuerzas políticas conjuntamente, en su caso, con los acuerdos bilaterales que sean necesarios en cada situación concreta.

3. En cualquier caso, estos pactos habrán de contener un acuerdo sobre el programa de situación en cada municipio.

La segunda resolución adoptada por el consell nacional se refiere directamente al tema de las diputaciones provinciales, y en ella se señala que las diputaciones son objeto de «una maniobra del Gobierno de UCD» para condicionar la vida municipal y el proceso autonómico de Cataluña. Tras señalar que las diputaciones deben ser abolidas, los socialistas proponen que, una vez constituidas las nuevas diputaciones, éstas adopten las siguientes resoluciones: reclamar al Gobierno la aprobación inmediata de la propuesta de transferencia de las diputaciones a la Generalidad; que no admitan modificación alguna del consell executiu de la Generalitat que tienda a introducir en él una representación de las diputaciones y pedir la transferencia a la Generalidad de las facultades del Ministerio del Interior en el nombramiento del presidente de la Corporación metropolitana de Barcelona.