UGT propone una respuesta sindical unitaria ante el giro de la derecha del Gobierno

Unión General de Trabajadores quiere acentuar las acciones unitarias con CCOO, como respuesta sindical a la política netamente de derechas que, en opinión de la central socialista, va a desarrollar el Gobierno, especialmente en temas laborales. «Esta actuación unitaria de las dos principales centrales no debe incidir en la vía del acuerdo o pacto a cuatro bandas que ha propuesto CCOO -señala UGT-, sino lograr una mayor presión social que complemente la acción parlamentaria del PSOE y otros partidos de izquierda para imposibilitar la concreción práctica de los propósitos de la derecha.»Este planteamiento es el resultado del análisis que sobre la situación política originada por el resultado de los recientes comicios ha efectuado la comisión ejecutiva de UGT, reunida ayer en Madrid.

La central socialista ha constatado, como consecuencia de los resultados de las pasadas elecciones generales, «un escoramiento a la derecha por parte de UCD y del Gobierno, que se va a reflejar en una política conservadora, fundamentalmente en cuanto a las relaciones con las centrales sindicales y el tratamiento que va a dar a los problemas que en la actualidad afectan a la clase trabajadora, especialmente el paro y el desarrollo de las normas sindicales recogidas en la Constitución ».

En cuanto al patrimonio sindical, UGT reitera su intención de llevar nuevamente el tema al Parlamento a través del PSOE y desarrollar nuevas acciones de presión para lograr que le sea devuelto el patrimonio incautado a raíz de la guerra civil. UGT rechaza que dicho patrimonio sea considerado de igual manera que el acumulado durante los años de verticailsmo y que su uso sea arbitrariamente cedido por el Gobierno a las centrales.

Por otra parte, y en relación con las recientes noticias sobre la posible convocatoria de nuevas elecciones sindicales, UGT considera que «el tema prioritario para la clase trabajado ra en estos momentos es conseguir urgentemente en el Parlamento una ley democrática de acción sindical, con carácter previo a cualquier convocatoria de elecciones». En esta línea, la central socialista considera que, de producirse tales elecciones, la convocatoria corresponde exclusivamente a las centrales sindicales mayoritarias, «sin injerencias gubernamentales».