Críticas al PSOE y PCE por su actuación parlamentaria con el tema de las autopistas A-2 y A-4

La actuación de los partidos parlamentarios de izquierda ante el -tema de la construcción de las autopistas de peaje A-2 y A-4 (Madrid-Guadalajara y Madrid-Toledo) fue duramente criticada ayer por la extrema izquierda. «Hace siete meses que fueron aprobadas y nadie ha planteado nada en el Parlamento»- por Siso García Vázquez, candidato a la alcaldía de Madrid por el Movimiento Comunista, en el curso de una mesa redonda sobre la A-4 en la Asociación de Vecinos de San Fermín.

Los participantes en la mesa redonda fueron Luis Larroque, PCE; Siso García Vázquez, MC; Tomás Villasante, PTE; un representante de LCR, y el responsable de Comisiones Obreras en el distrito de Villaverde. Los restantes partidos, PSOE, ORT y UCD habían asegurado el pasado jueves a los organizadores que asistirían bien los candidatos a la alcaldía o bien algún miembro de las listas. Sin embargo, no llegaron a presentarse.Previamente al debate, los responsables del mismo habían distribuido un documento en el que se manifestaban en contra de la construcción de la A-4, ya que es la que los afecta directamente, por considerar que beneficia exclusivamente a la especulación y al gran capital y que con el dinero que se invertirá en ella -50.000 millones de pesetas en la A-2 y A-4- se puede contar con un transporte público realmente positivo y satisfactorio para los vecinos de Madrid.

Partiendo de estas ideas, aceptadas por todos los participantes en la mesa redonda, lo más destacable del debate fue la recriminación hecha por Siso García Vázquez al representante del PCE. «En agosto de 1978, el Consejo de Ministros aprobó la salida a concurso de ambas autopistas. PSOE y PC E se han pronunciado siempre en la calle contra su construcción; sin embargo, contando con parlamentarios, no han planteado el tema en las Cortes. El PSOE había anunciado que leería una proposición no de ley contra estas dos autopistas, pero lo cierto es que nunca llegaron a leerla. Ahora, el Parlamento está disuelto y se han perdido siete meses de lucha parlamentaria que en el fondo suponen la aceptación de estos dos partidos de izquierda de los planes del gran capital.»

Luis Larroque respondió que el PCE propuso, un mes después de su legalización, un proyecto de ley en el que se pedía la creación de un consorcio del transporte público de Madrid. Además de esto -señaló el señor Larroque- en el libro escrito por Ramón Tamames, Madrid para la democracia, quedaba clara la postura del partido a favor del transporte público. Finalmente, se refirió a que el PCE solamente cuenta con veintiún diputados en el Parlamento y que con ese número es difícil conseguir algo cuando son muchos los temas a tocar y pocas las personas para defenderlo, «hay otros partidos -dijo, refiriéndose al PSOE- con más posibilidades que no han planteado nada».