Reutemann ganó en Watkins Glen

El argentino Carlos Reutemann, sobre Ferrari, se adjudicó el Gran Premio de Estados Unidos-Este, penúltima prueba puntuable para el Campeonato del Mundo de Fórmula 1. Andretti, virtual campeón y futuro compañero de Reutemann en la próxima temporada en el equipo Lotus, tuvo que abandonar. Con ésta, es la cuarta victoria de Reutemann en esta temporada.

En los entrenamientos no oficiales celebrados en la mañana de la carrera, el italoamericano Mario Andretti, que había hecho el mejor tiempo en los oficiales, sufrió un espectacular accidente, del que salía ileso, pero que destrozaba totalmente su coche. Esto obligaba a un replanteamiento en el equipo Lotus. Jarier, que había alquilado el segundo monoplaza -que debería haber pilotado el fallecido Peterson-, se veía obligado a dejar éste a Andretti, para salir él con el de reserva.Pese a la fulgurante arrancada del ya campeón, que estaba ansioso de conseguir un triunfo ante sus compatriotas -victoria que se le escapó también la pasada temporada-, Andretti no podía impedir ser rebasado en la segunda vuelta por los dos Ferrari de Reutemann y Villeneuve. Su coche no estaba perfectamente a punto, al no haber tenido tiempo material para ello, y, pese a que el italoamericano se esforzó al máximo por seguir en cabeza, no pudo lograr su objetivo. Además, con su vano esfuerzo, Andretti hizo estallar el motor, por lo que tuvo que abandonar.

Con el abandono de éste, de Lauda y de Villeneuve, Reutemann ya no tuvo obstáculo para imponerse y conseguir su cuarta victoria de la temporada. El Ferrari es el vehículo más apto -junto con el Brabham, Renault y Ligier- para este tipo de circuitos tan rápidos como Watkins Glen, en el que el promedio, tras más de trescientos kilómetros de carrera, es casi de doscientos por hora.

Después de esta carrera, penúltima de la temporada, la clasificación del mundial se mantiene con Andretti como ya virtual campeón, con 64 puntos, seguido por el fallecido Peterson, con 51, y Reutemann y Lauda empatados a 44.