Hinault ganó ayer y aumentó su ventaja

El francés Hinault dio ayer un paso fundamental para ganar la Vuelta a España, al imponerse en la decimoctava y penúltima etapa, Bilbao-Amurrio, de 154 kilómetros. Para demostrar que puede ser un justo y claro vencedor de la carrera, la gran promesa del ciclismo francés lanzó un duro ataque antes del puerto de Orduña -kilómetro 45-, de primera categoría-, uno de los cinco puntuables -cuatro de tercera- de la etapa. Rompió la carrera, alcanzó a Gandarias y Pizzini, que marchaban escapados, en la bajada del de Viloria -83- y los dejó -primero al español y luego al italiano- a treinta kilómetros de la meta, cuando vio que no le servían sus relevos, pasando los dos últimos puertos, Ayurdin y Chozas, en cabeza. A Amurrio llegó con 1-56 de margen sobre un grupo de catorce hombres, en el que iban sus principales enemigos.En la general, Hinault, con 83-10-28, supera a Pesarrodona en 2-52; Bernaudeau -joven galo que también ha hecho una gran Vuelta- está a 3-47; Eulalio García, a 4-17; Schippers -otra sorpresa-, a 4-18; Van den Haute, a 6-01; Nazábal, a 6-22; M. Heredia, a 6-51; Aja, a 10-22; López Carril, a 13-57, y Oliva, del Teka -ya rey de la montaña, por delante de Cima, que está a 21-54-, a 14-39.

La etapa de hoy, última de la Vuelta, se correrá en dos sectores. El primero, por los incidentes de ayer en Galdácano, se iniciará en Amurrio y hasta San Sebastián -velódromo de Anoeta- tendrá 148 kilómetros, treinta más de los previstos en un principio. El segundo sector, vespertino, será contra reloj, individual, sobre 31,7 kilómetros. Salvo una gran carrera de Pesarrodona, Hinault puede cerrar su Vuelta triunfal con otro éxito.