El Atletico, derrotado con estrépito

El Atlético ha perdido con estrépito en su primera salida del actual campeonato de Liga. La Real no utilizó para vencer más armas que la fogosidad, el acierto rematador de Satrústegui y la constante calidad de López Ufarte. El Atlético jugó bien en el centro del campo, pero sólo en esa zona. En realidad perdió con justicia.La Real tiene de siempre un equipo peleón, que en su casa es difícil de sujetar. Ante este once, el Atlético quiso jugar un encuentro tal vez demasiado cómodo: tranquilamente atrás, armando un fútbol tranquilo en el centro del campo y sin arriesgar demasiado en el ataque. La Real, consciente de su inferioridad técnica -dejando aparte a López Ufarte y Satrústegui, el resto de jugadores están a un nivel medio bastante más bajo que los del Atlético trató de echar toda la carne en el asador desde el principio. En los primeros minutos, los ataques de la Real fueron continuos, y el Atlético pareció desconcertarse. En el minuto ocho, en una preciosajugada, la Real anotaba su primer tanto y amenazaba con desmoronar al Atlético. La suerte para el equipo de Luis fue que en la jugada de saque de centro forzó un córner a consecuencia del cual llegó el empate.

Este rápido tanto amainó bastante los impulsos de la Real, que, sin duda, comenzó a pensar en el Atlético como un equipo con los clásicos atributos de los conjuntos grandes, difícil de batir y con posibilidades de marcar gol en cualquier contraataque. Eso hizo que la Real jugara conciertas precauciones a partir de entonces, y que el Atlético pudiera armar su juego con cierta tranquilidad en la media. Hasta el descanso, el centro del campo del Atlético lució un excelente juego, especialmente por parte de Marcial y Robi, bastante bien secundados por Alberto y Leal. Lo malo era para el Atlético que en los últimos metros en el engarce centro del campo-delantera nada funcionaba. Ayala fue una nulidad completa.

Comenzada la segunda parte con la misma tónica, ocurrió que en el sexto minuto de juego Pereira decidió ir al ataque para ver si solucionaba las cosas. El Atlético estaba jugando mejor y sólo le faltaba un poco más de empuje en el ataque para ponerse por delante. Pero la primera jugada en que subió Pereira en este segundo tiempo, la Real cazó al Atlético al contrapié, en el contrataque y marcó un precioso gol. El Atlético había buscado el gol, pero la fortuna se le había vuelto de espaldas. A partir de ahí, ya todo fue más fácil para la Real. El Atlético tuvo que adelantar más las líneas, arriesgar más, para buscar el gol del empate. La Real se defendió con ardor, a veces con algo de dureza y con sus contraataques, consiguió dos goles más, los dos obra de Satrústegui.