Cinco millones doscientos mil deficientes, marginados de la sociedad española

Una tabla de reivindicación de catorce medidas urgentes y una denuncia en general de la situación marginada que padecen en España los subnormales, minusválidos físicos y enfermos síquicos, componen un documento elaborado por un equipo de expertos, y que ha sido ratificado por la mayor parte de los partidos políticos y organizaciones democráticas.

El documento contabiliza unos 350,000 subnormales mentales, más de un millón de minusválidos físicos de diferentes tipos, 350.000 enfermos siquicos con trastornos graves y 3.500.000 con trastornos de menor importancia, pero que requieren atención terapéutica. En total suponen 5.200.000 personas que, en su mayor parte, padecen una indebida atención sanitaria y una fuerte marginación social.El documento aludido señala la sujeción de los enfermos síquicos a una legislación anacrónica (ley de 1931), que habla únicamente de recluir y custodiar, pero no de curar. Respecto de los subnormales mentales, entre otras cosas, explica cómo sólo aquellos en edad escolar reciben una cierta asistencia, aunque de todo tipo y forma insuficiente o inadecuada. De los minusválidos expone una situación semejantemente caótica, que puede resumirse en el dato de la inaplicación de la normativa que obliga a las empresas de más de cincuenta trabajadores a emplear un número de minusválidos que no baje del 2 % de la plantilla; en vez de esto, generalmente, cuando se los emplea, se hace de forma explotadora, como mano de obra barata y subvencionada.

Política eficaz

«Los Gobiernos franquistas y posfranquistas -dice el documento- han prestado a estas minorías marginadas una atención casi exclusivamente retórica, expresada a veces en actos grandilocuentes, como la Conferencia de Minusval-74, en los que los discursos oficiales no se han visto seguidos de actuaciones reales. Algunos organismos creados sobre el papel del Boletín Oficial del Estado jamás han llegado realmente a funcionar, tales como: la Comisión para el Estudio de Problemas de Subnormales, dentro de la Presidencia del Gobierno, constituida por decreto de Carrero Blanco, pero jamás existente; la Comisión Interministerial para la Integración Social de los Minusválidos, constituida tras Minusval-74, bajo la presidencia de Licinio de la Fuente, o la Comisión Interministerial para la Reforma Sanitaria, cuyos trabajos no han sido operativos.»Los autores del documento consideran una política fundamental de la prevención y rehabilitación. Sobre la prevención, estimada como casi totalmente ausente en España, se cita la apreciación del comité asesor del presidente de Estados Unidos para asuntos de deficiencia mental, que considera evitables un 50 % de los casos de subnormalidad con unas medidas preventivas adecuadas.

Tabla reivindicativa

Los catorce puntos de la tabla reivindicativa se refieren a: la coordinación descentralizada de todos los servicios de asistencia: la actividad en el marco de una escuela considerada como servicio público y una medicina socializada; la prevención mediante la creación de unidades tocológicas especializadas; legislación sobre aspectos urbanísticos que tengan en cuenta las necesidades y limitaciones de los minusválidos; control y fiscalización democráticos de todo tipo de atención y tratamiento; creación -dentro del sistema escolar ordinario- de las instituciones sico-pedagógicas necesarias para atender los diferentes géneros de problemas; preparación del personal profesionalizado y cualificado necesario; creación de centros para ciertas clases de sujetos afectados; integración plena de los deficientes -cuando sean capaces de ella- en los centros para niños normales; programación de una enseñanza y educación reales en los hospitales infantiles para las estancias de larga duración; regulación eficaz del empleo de minusválidos y subnormales capaces de trabajar; establecimiento o elevación de ayudas económicas; campaña de mentalización social y estudios sociológicos y estadísticos sobre los citados tipos de deficientes.