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Francia no llegó al 10% de inflación en 1976

La batalla contra la inflación, iniciada por el primer ministro, señor Barre, con su plan del pasado mes de diciembre, empieza a obtener los primeros resultados positivos. El aumento de precios, del último mes de diciembre, se limitó al 0,3 %. Con ello, la inflación global del año 1976 se situó, con el 9,9%, por debajo de los dos dígitos, tal y como pretendía el plan. Paralelamente, ayer, se conocieron los resultados del comercio exterior. En diciembre, el déficit ascendió a 1.300 millones de francos, contra los 3.800 del mes anterior, estas cifras suponen para el ejercicio 1976, 20.452 millones de francos de déficit comercial, unos 280.000 millones de pesetas. Esta cifra equivale a la mitad del déficit comercial español.El primer síntoma serio del freno, de la inflación lo atribuyen los expertos al bloqueo de los precios impuesto por el «plan-Barre» durante los tres últimos meses del año pasado. Por otra parte, la disminución del impuesto de la «TVA» (tasa sobre el valor añadido), vigente desde primeros del año en curso, se espera que opere positivamente en 1977.

El control de precios se revela eficaz. La «ruptura» del ritmo de alza de precios, por un lado, y el buen índice que supone la disminución sensible, en diciembre, del déficit exterior, han tenido dos efectos inmediatos: la mejor disposición de los jefes de empresa, que se manifestaron más dispuestos a «jugar el juego», según una encuesta conocida ayer, y la revalorización del franco desde que los precios empezaron a bajar.

En última instancia, la opinión pública, reticente hasta la fecha, da la impresión de empezar a «creer» en el profesor Barre, lo que implica un factor sicológico muy influyente para el porvenir. Especialistas y responsables coinciden en que, a pesar de los buenos síntomas, la pelota aún está en el tejado: el paro obrero, que supera el millón de precios, y el desequilibrio exterior ofrecen la prueba.

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