Coordinación Democrática no tendrá mitin en los estadios madrileños

La Real Sociedad y el Athletic de Bilbao le han metido un gol a Coordinación Democrática. Cuando los líderes de la oposición andan pensando en la posibilidad de solicitar el Santiago Bernabéu para celebrar un mitin, los clubs vascos, cuyos jugadores tienen fama de demócratas y se erigen en hombres importantes dentro de las comisiones pro amnistía, son los únicos que sacan tajada de la «Casa Blanca». No habrá posibilidad, pues, con estas veleidades de que la directiva madridista se muestre complaciente con Coordinación. Que los jugadores hayan coqueteado con alguna comisión de obreros parados y prestado su ayuda más o menos simbólica tiene un pase, pero que encima respeten en el campo a los demócratas del balompié, eso ya no puede tolerarse. Lo de los coros y danzas, como era habitual cada año, sí; política en recintos deportivos, no, que ya se sabe lo que pasó con Raimon.Los estadios de Madrid no abrirán sus puertas a la democracia. Si Felipe González, el profesor Tierno Galván y Ruiz Jiménez quieren dirigirse al personal en forma masiva, tendrán que recurrir a lo clásico: el campo de Mestalla, como hizo don Manuel Azaña para lanzar el Frente Popular, las plazas de toros o los trinquetes valencianos, como hacía el tradicionalista Jaime Chicharro, padre del desaparecido Hércules Cortés.

El Real Madrid alquiló su Pabellón de Deportes para la actuación de Raimon, pero, tras la suspensión de los recitales, la directiva acordó no ceder sus instalaciones para otros fines que no fueran estrictamente deportivos. Así se le hizo saber a Fuerza Nueva cuando lo solicitó. Santiago Bernabéu no le dejará su estadio ni al propio Ruiz-Giménez. Bernabéu fue hombre cercano a la CEDA, pero ni siquiera con Gil Robles quiere el menor contacto. Y menos desde que el hijo del ex ministro se encargó de defender al Athletic y a la Real para demostrar que Roberto Martínez había entrado en España de manera poco ortodoxa.

Conviene que Coordinación Democrática sepa que tampoco puede dirigirse al Atlético de Madrid porque aunque el «Abuelo» era colchonero, las co sas cambiaron mucho después de la guerra. El club mantuvo su masa popular, pero estuvo siempre en manos de la derecha más caracterizada. Hoy manecci, de la que el actual presidente de la Federación Española de Gimnasia y oponente de Bernabéu, señor Fernández, dijo simple y llanamente para RTVE que no desea que España produzca esta clase de «monstruos». Es natural que el señor Fernández esté a favor del cocidito madrileño, al que Pepe Blanco aprendió a mirar con ternura desde pequeño, y en contra de los anabolizantes, pero se olvidó de que lamentablemente los españoles, en los Juegos Olímpicos, ni con píldoras. Para una vez que un ciclista se animó con la coramina, le descubrieron y tuvo que devolver la medalla.

La jornada de Liga con la derrota del Atlético en Sevilla frente al Betis -los sevillistas esta semana no gastarán bromas con lo de la marcha verde- y el empate del Madrid en su propio campo, ha envalentonado más a Valencia y Barcelona. En una semana tan importante como la presente, nos desayunamos con el fortalecimiento de la periferia. A este paso se acaba con el centralismo mucho antes de lo imaginado. Y eso que el único candidato a la presidencia de la Federación Española de Fútbol es el señor Porta, que aunque catalán, es «periquito» y de la UDPE.