Vicente Calderón no se considera inmovilista

Con una asistencia aproximada de 300 compromisarios celebró el club Atlético de Madrid su Asamblea General Ordinaria, presidida por 10 directivos al frente de los cuales se encontraba don Vicente Calderón. Reinó la cordialidad en toda la reunión y los mejores deseos en busca del bien de los colores rojiblancos. Se fue condescendiente y una vez leídos los nombres de los compromisarios asistentes por el gerente, señor Carrascosa, y proclamar el presidente, constituida la Junta Gestora, se autorizó la entrada, en el salón Dos Castillas, del Hotel Meliá, de los socios que hasta allí se desplazaron, aunque eso sí, sólo para ser meros espectadores sin voz ni voto en los asuntos que allí se trataran.Comenzó la asamblea con el requerimiento de don Vicente Calderón para que se designasen tres compromisarios que habrían de firmar el acta. Se propusieron los tres primeros de la lista, los socios números 6, 15 y 18. Seguidamente tomó la palabra el tesorero, don Ricardo Irezábal que hizo un profundo análisis de lo que fue la temporada pasada en los aspectos deportivo y económico. Mencionó el tercer puesto de la Liga, la consecución de la Copa y la participación del club en la Recopa europea. Aludió, asimismo, a los torneos veraniegos para pasar al capítulo de altas y bajas donde se detuvo con palabras cariñosas para, Adelardo que fueron rubricadas con aplausos por los asistentes.

Prosiguió con citas para las otras categorías y las distintas -secciones en que el club cuenta con participación. Dio a conocer el señor

Irezábal el alta de 2.075 nuevos socios, así como las mejoras en los sistemas de megafonía e iluminación del estadio.

Las cuentas claras

Los ingresos de la temporada 1975/1976 ascendieron a 297.160.590,60 pesetas, lo que dio un beneficio líquido de 6.487.118,92 pesetas. Para la próxima se piensa obtener unos ingresos de 349 millones con los que hacer frente a los pagos previstos de 347,5 millones de pesetas. Aprobación absoluta por parte de los compromisarios.

Ruegos y preguntas

Llegó el turno de participación directa de los compromisarios, fueron varios los que intervinieron. El socio 10.983 planteó la situación del problema arbitral y la persecución de que era objeto el Atlético, y pidió la dimisión de Plaza en su propio nombre y en el de los aficionados del Atlético y de otros clubs, de los que dijo contaba con su apoyo, sin hacer intervenir para nada a ningún club, sólo en nombre de la afición al fútbol. Se habló del peligro que puede suponer para la entidad, el lanzamiento de almohadillas, del cuidado para los servicios y aseos, de las facilidades y accesos por las puertas del estadio. También se achacó a la comisión organizadora el fracaso del homenaje al jugador Adelardo. El presidente respondió a todos con general aprobación.

«El club está abierto a todos»

Don Vicente Calderón inició su turno pidiendo se hiciera constar en acta el pesar por el fallecimiento de los socios, don Zoilo Gutiérrez, don Valentín Ezquerra, don Bruno Martín Melchor y don Cosme Vázquez (jugador y directivo que fue del club). Expresó sus deseos de pronta recuperación en sus respectivas enfermedades para los hermanos Cotorruelo (socios números 1 y 2) y para el doctor Muñoz Calero. Se refirió a la baja del actual ministro de Relaciones Sindicales, don Enrique de la Mata por incompatibilidad de cargos e incidió en las mejoras que antes había dado a conocer el tesorero.Dijo que la temporada pasada fue caliente y espera que ésta lo sea más aún. « La forma de administrar -en el club se refería- es limpia y diáfana y la Junta no es de carácter inmovilista». Indicó que el próximo balance quiere que venga inspeccionado por censores de cuentas «Nosotros podemos hacerlo, allá los que no puedan», fueron sus palabras.

Para terminar, informó don Vicente que este año se celebrarán elecciones de junta directiva y su desconocimiento de que exista algún grupo de oposición. «El que venga con las dotes necesarias de sacrificio, honestidad, solvencia y responsabilidad puede asumir la presidencia cuando quiera». Después añadió que está dispuesto a llegar a la celebración de las bodas de platino del club para dentro de dos años. «Pero si es necesario, seré el primero en marcharme». La mayor ovación de la mañana, con los compromisarios puestos en pie, puso punto final a la reunión.