Un sueño perdido para el Barcelona
Anoche, la asamblea del Gijón dijo no al traspaso de Quini. La decisión del club asturiano se esperaba con auténtica expectación en Barcelona y no cesaron de sonar los teléfonos en espera de noticias sobre la decisión que pudieran tomar los socios compromisarios. El «no» ha sentado como un tremendo jarro de agua fría, y posteriormente vendrán las consideraciones y los lamentos. De momento, sólo hay una tremenda decepción. Para el Barcelona, Quin¡ no era unjugador cualquiera, tampoco era sólo uno de los tres refuerzos con que iba,a afrontar el equipo la próxima temporada. Rinus Michels expuso claramente sus ideas, y Quin¡ se presentaba como la panacea a los males goleadores que afectan al equipo y que podrían tener en el ariete internacional sportinguista la respuesta adecuada. El aficionado azulgrana soñaba ya con las combinacíones Cruyff-Quini. Pues bien, han sido sueños de una noche de verano, porque Quin¡ no vendrá al Barcelona.A cinco días del comienzo de la Liga, la noticia ha caído como una bomba entre la afición, y los reproches vendrán más tarde si el equipo no funciona. La Directiva podrá argumentar que ha hecho todo lo posible, pues llegó a la extraordinaria cifra de 50 millones de pesetas. Pero el afi-ionado piensa que el asunto no se ha llevado bien -desde el principio, y que si esa cifra hubiera estado sobre la mesa desde un comienzo, Quin¡ sería a estas alturas jugador del Barcelona. Un cierto pesimismo es el primer signo externo del fallido fichaje. El Barcelona esperaba luchar en igualdad de condiciones con el Real Madrid, Atlético de Madrid y Valencia para la conquista de la Liga. Ahora no podrá hacerlo. Según palabras textuales de Michels: «Si no se puede contratar a Quin¡, el sistema táctico del Barcelona habrá de variar por completo, y nuestras posibilidades serán más reducidas con respecto a nuestros más directos rivales. »
