Comienza en Colombo la cumbre de los no alineados

Con una dura crítica a la presencia de Estados Unidos en el Tercer Mundo, a los regímenes minoritarios blancos de Africa y a Israel, la señora Sirimavo Bandaranaike, jefe del Gobierno de Sri Lanka, dejó inaugurada ayer la V Conferencia Cumbre de jefes de Estado de países no alineados.Sólo 40, de los 85 jefes de Estado que debían haber concurrido, asistieron a la inauguración de la asamblea del Tercer Mundo, que se celebra por primera vez en un país asiático.

Entre los asistentes más destacados figuran el presidente yugoslavo, Josip Broz Tito, fundador del movimiento; el presidente argelino, Huari Bumedian; la primer ministro de la India, señora Indira Ghandi; el presidente egipcio, Anuar Sadat; los jefes de Estado de Libia y Siria, Muamar el Gadafi, y Hafez el Assad, respectivamente, y el secretario general de las Naciones Unidas, Kurt Waldheim.

La líder de Sri Lanka acusó a Israel de «desafiar todos los conceptos civilizados de conducta internacional», con su continua «manipulación de los territorios adquiridos a base de la agresión». La señora Bandaranaike también denunció la política racista de los Gobiernos minoritarios blancos de Sudáfrica y Rodesia, y señaló que éstos violan «no sólo los derechos democráticos de la rnayoría de sus pueblos, sino también los derechos humanos básicos».

En un ataque directo a Estados Unidos, la jefe del Gobierno dijo que el Tercer Mundo debía exigir a retirada de la presencia militar norteamericana de Corea del Sur y el océano Indico, y después de pedir el apoyo de todos los jefes le Gobierno presentes para que el Indico sea convertido en una zona de paz, solicitó el desmantelamiento de la base norteamericana de Diego García y la retirada de las flotas norteamericanas y soviéticas de la región.

Son, sin embargo, los problemas económicos los que centrarán la atención de los jefes de Estado no alineados y, en este aspecto, Sri Lanka propuso la creación de tres bancos comerciales, para Asia, Africa y América Latina.

En Colombo se tiene la impresión de que los no alineados tienen la intención de esquivar los problemas más escabrosos surgidos entre ellos, tales como la guerra del Líbano y la cuestión del Sahara occidental, que, de plantearse, podría llevar a la división de los Estados en los bloques o regiones relacionadas con estos temas.

El número importante de ausencias, cuarenta y cinco en total, de algunos de los jefes de Estado más radicales, parece estar relacionado con esa tendencia a la moderación.

El día de ayer fue declarado festivo en Colombo, y miles de personas pudieron lanzarse a las calles para vitorear a las caravanas de líderes tercermundistas a su paso por las calles de la capital ceilandesa.

Un nuevo orden económico internacional es el objetivo principal de esta conferencia no alineada, objetivo que, en esencia, quiere decir reducir el abismo existente entre las naciones «ricas», ausentes de Colombo, y las «pobres», representadas allí en su mayor parte.

Conscientes de que su progreso tropieza con intereses de los grandes monopolios internacionales, los países del Tercer Mundo se disponen a fundar instituciones o centros que protejan los precios del café, cobre, caucho y otras materias primas.

Cuarenta jefes de Estado estuvieron ayer presentes en la inauguración, junto a diez observadores, diez invitados y once delegados de movimientos de liberación nacional.