El Barcelona se concentra en Holanda
Rinus Michels apareció y desapareció de Barcelona como por arte de encanto. Se halla de vacaciones, pero nadie sabe dónde está, aunque antes de partir por esos mundos lejos del ambiente futbolístico, dejó órdenes estrictas sobre la preparación en el mes de agosto del F.C. Barcelona. Cinco partidos va a disputar el equipo en ese mes, más tal vez alguno suplementario contra un equipo de la región. Serán dos encuentros en el torneo de Palma, a mediados de mes, dos más en el trofeo Juan Gamper una semana después, y otro final en el homenaje a los jugadores Rifé, Sadurní y Torres, que tendrá lugar unos días antes de comenzar la Liga.Con anterioridad a esas fechas, Micheis concentrará al equipo en una localidad holandesa, Papendal, a cien kilómetros de Amsterdam. En Papendal hay un conjunto polideportivo, con varios campos de fútbol, pistas de atletismo y de tenis, y también una residencia bastante austera, con habitaciones de dos camas sin ningún confort y un restaurante -«self-service», por supuesto sin camareros- Es decir, la comida se la han de servir los propios jugadores. Para la mentalidad española, aquello tiene la apariencia de un cuartel, y lo recordamos de la última vez en que estuvo concentrado allí el Barcelona, también con Michels. Los jugadores tenían un enfado considerable, porque están acostumbrados a los hoteles de cuatro y cinco estrellas, pero no les quedó otro remedio que adaptarse a las circunstancias, como tendrán que hacer en el próximo agosto. Ni cine ni diversiones en varios kilómetros a la redonda. Sólo la televisión, pero en holandés. Eso sí, una calma extraordinaria y un clima que fluctúa alrededor de los 15 grados. En suma, un lugar ideal para trabajar y entrenarse, que es lo que quiere el «sargento de hierro» azulgrana, como así se te llama a Michels.La concentración le va a costar al Barcelona muchos miles de pesetas entre viajes y estancia, pero el entrenador holandés argumenta que en España no hay nadie similar y que él quiere entrenar cada día en un campo de hierba cercano al lugar del alojamiento. Efectivamente, aquí faltan instalaciones deportivas de esa índole y uno piensa que el dinero de las quinielas podría estar dedicado, por ejemplo, a la creación de estos complejos deportivos, que serían de mucha utilidad no sólo para los clubs, sino incluso para la selección nacional, cuyo peregrinaje en busca de campo de entrenamiento en las concentraciones de Kubala es siempre una odisea.
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