Aitana Bonmatí, operada de la fractura de peroné, se pierde prácticamente toda la temporada

Aitana Bonmatí estará cinco meses de baja tras ser operada este martes del peroné izquierdo que se fracturó este domingo en un entrenamiento con la selección española. La tres veces y actual Balón de Oro, primordial en el juego y centro del campo del Barcelona, se perderá prácticamente toda la temporada, aunque podría reaparecer en mayo —la final de la Champions será el 23 de ese mismo mes en Oslo— si se cumplen los plazos estimados por los servicios médicos del club azulgrana. “La jugadora del primer equipo Aitana Bonmatí ha sido intervenida satisfactoriamente de la fractura transidermal del peroné izquierdo. Esta cirugía ha corrido a cargo del doctor Antoni Dalmau, en el Hospital de Barcelona, bajo supervisión de los Servicios Médicos del Club. El tiempo previsto de recuperación será de alrededor de cinco meses”, ha comunicado el Barça este martes, horas antes de que la selección española se enfrente a Alemania en la vuelta de la final de la Nations League en el Metropolitano.

Precisamente fue en Las Rozas este domingo cuando Aitana sufrió esta fractura. La lesión se produjo tras un mal apoyo en una acción fortuita durante el entrenamiento matinal, y después de someterse a las primeras pruebas médicas, se confirmó la fractura. La futbolista de Sant Pere de Ribes regresó a la Ciudad Condal para realizarse más exámenes médicos este lunes, cuando se confirmaron los peores presagios: Aitana debía pasar por quirófano y, por lo tanto, los tiempos mínimos de recuperación aumentaban drásticamente.

La centrocampista, que parecía ajena a las lesiones en su carrera y es una de las jugadoras con mayor regularidad física a pesar de la carga de minutos acumulada en sus piernas temporada tras temporada, estará alrededor de cinco meses de baja. Regresaría para el tramo más importante del curso, en plena disputa de los títulos, pero necesitaría coger ritmo para poder enfrentarse a hipotéticas semifinales —2 o 3 de mayo— o final —23— de la Champions. Se perderá la Supercopa de España —enero de 2026— y todas las rondas de la Copa de la Reina, excepto una posible final —16 de mayo—.

La baja supone un golpe importante, sobre todo para el Barcelona, que ve cómo su enfermería se llena de futbolistas cruciales en su juego —Patri Guijarro, Esmee Brugts, Salma Paralluelo y Kika Nazareth— en una temporada con una plantilla muy corta. Además, la mayoría, tres de las cinco futbolistas, se han lesionado en partidos o entrenamientos con sus selecciones, lejos del club. El Barça, debilitado, ha enviado un mensaje de ánimo a Aitana: “El reto es grande. Tu fuerza, más”.

Y la jugadora, en Instagram, también ha enviado un mensaje. “Y esta es la otra cara del deporte. Hoy me toca empezar un nuevo reto fuera de los terrenos de juego. Ahora es momento de regenerarme físicamente y mentalmente. El fútbol de élite te lleva al límite en todos los aspectos y existen factores que actualmente me estaban impidiendo poder disfrutar de la profesión y del día a día”, ha compartido. Aitana ya arrastraba unas molestias en su isquio izquierdo desde hacía unas semanas que no le permitían jugar al cien por cien. Fue el motivo por el que no fue titular en el clásico, aunque disputó el partido, anotó un gol y días después jugó los 90 minutos ante el Chelsea. Esta temporada, tan solo se ha perdido un encuentro.

“Honestamente, sentía que era un momento para poner el freno y, de hecho, me lo planteé, pero no lo hice y la vida me ha frenado de golpe. Con esta lección afronto lo que viene convencida de que será un aprendizaje”, añadió Aitana, que agradeció a los servicios médicos por la operación, y también por apoyo que está recibiendo.